Las pestañas pueden ser la clave para una mirada deslumbrante, pero si no reciben un cuidado adecuado, estas tienden a volverse delgadas y cortas con el paso del tiempo.
Cuidarlas no requiere de grandes procedimientos, pero si de constancia.
ACEITE DE RICINO
Es maravilloso para hacer crecer el cabello, las cejas y las pestañas, la ciencia detrás de su poder se encuentra en el ácido ricinoleico (un activo que constituye más del 80% de este óleo) que se ha descubierto en contadas investigaciones ayuda a revertir la caída capilar. Además, su uso hace que las pestañas brillen y se vean mucho más densas.
ALOE VERA
Posee cualidades antiinflamatorias, hidratantes y estimulantes del flujo sanguíneo, de acuerdo a un artículo de Brazilian Journal of Microbiology, se considera que puede ayudar a crecer, espesar y fortalecer las pestañas. Pese a que aún faltan estudios para comprobar su eficacia, pero a decir de quien lo ha utilizado es muy recomendable.
ACEITE DE COCO
Este las protege contra el daño luego de la limpieza facial o el desmaquillado de ojos, además previene infecciones en esta delicada área de la piel, causadas por la contaminación del rímel, sombras o delineadores.
Según varias investigaciones de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, el aceite de coco combate microbios, bacterias y hongos gracias a su contenido en ácido láurico y también reduce la pérdida de proteínas en los folículos capilares después del lavado.