Querétaro enfrenta un cierre de 2024 con expectativas económicas moderadas y un entorno marcado por incertidumbre política y económica, afirmó Beatriz Hernández Rojas, presidenta de COPARMEX Querétaro, al advertir que la confianza en el Estado de derecho en México “es aún frágil”, afectando las inversiones y el cumplimiento del T-MEC.
“Este último trimestre de 2024 nos encuentra en un clima donde aún predomina la incertidumbre por las decisiones políticas del gobierno federal”, comentó Hernández Rojas, enfatizando que estas condiciones influyen directamente en la confianza empresarial.
Beatriz Hernández refirió que de acuerdo con datos recientes, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) estima que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de México será del 1.4% para 2024, una revisión a la baja en comparación con expectativas anteriores.
En contraste, el Fondo Monetario Internacional (FMI) mantiene una proyección más optimista del 2.2%, aunque también ha ajustado sus expectativas debido a la desaceleración de la economía estadounidense y la menor demanda de manufacturas mexicanas.
A pesar de las expectativas de crecimiento moderado, los sectores como la manufactura y el comercio han mostrado señales de recuperación impulsadas por el "nearshoring". Sin embargo, Hernández Rojas aclara que este crecimiento no alcanza los niveles esperados.
“Hace un año se proyectaba que un mayor número de empresas extranjeras se instalaran en México buscando reducir riesgos y costos en sus cadenas de suministro”.
En cuanto a la inflación, refirió que aunque se ha observado una tendencia a la baja, sigue afectando el poder adquisitivo de los consumidores, lo que limita el crecimiento en sectores críticos como el comercio minorista y los servicios.
“El consumo interno es clave para la economía mexicana, y la inflación continúa siendo un obstáculo para el crecimiento”, destacó Hernández Rojas.
Asimismo, Hernández Rojas apuntó se prevé un aumento en la adopción de tecnologías digitales y automatización en empresas de diversos tamaños, especialmente en el sector manufacturero. Esto se da en respuesta a la demanda internacional de productos de mayor calidad y con menor huella ambiental.
“Las empresas están buscando eficiencia y adaptación a las nuevas exigencias del mercado”, explicó.
Respecto a la energía, la presidenta de COPARMEX Querétaro subrayó que el gobierno federal enfrenta el desafío de proveer energía suficiente a todo el país.
“Se requieren reformas y actualizaciones al marco regulatorio en el sector energético para avanzar hacia un desarrollo sostenible”, afirmó. Sin embargo, hasta ahora no hay señales claras de cambios estructurales que favorezcan las energías limpias y la apertura a la inversión privada.
Finalmente, Hernández Rojas concluyó que “el entorno de tasas de interés y las decisiones del Banco de México serán determinantes para la inversión en el próximo año”.
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