Para este jueves, viernes y sábado los vendedores de pescados y mariscos aumentaron en 70% su inventario, adelantando una semana la disponibilidad de sus productos, en los mercados de La Cruz y Escobedo.
Anticipándose a la afluencia de compradores durante la Semana Santa, los comerciantes han implementado esta medida para asegurar que los consumidores encuentren todo lo que necesitan para sus celebraciones religiosas y gastronómicas en estos establecimientos locales.
Los mercados de La Cruz y Escobedo se llenan de actividad en estos días previos a la Semana Santa, con decenas de personas recorriendo los pasillos en busca del pescado fresco del día. Entre las variedades más solicitadas se encuentran el tilapia, bagre, sierra, jaiba, camarón, atún, ostión y hasta salmón, entre otros.
Los precios varían según el tipo de producto. Por ejemplo, el kilo de bagre se vende a 150 pesos, al igual que la manta. El camarón cristal y el camarón sin cabeza tienen un precio de 220 pesos por kilo. La tilapia se encuentra en 130 pesos por kilo, mientras que la mojarra está en 110 pesos. En cuanto a los pescados de mayor demanda, el huachinango se sitúa alrededor de los 240 pesos por kilo, mientras que el róbalo se encuentra en 180 pesos. Estas opciones de precios permiten que haya alternativas para todos los presupuestos.
Esta amplia oferta responde a la gran demanda que caracteriza esta temporada, especialmente considerando que muchos negocios cierran por las vacaciones, lo que impulsa a los consumidores a anticipar sus compras para asegurarse de tener los ingredientes necesarios para sus celebraciones.
"El filete es lo que más piden, la mojarra, los camarones, ahorita aumenta mucho la venta y estamos desde la mañana ahí haciéndole todo para tener qué vender. Sí le vendemos un 70% que otros años, pues la gente es lo que come; toda la Semana Santa, desde la Cuaresma, va crece y crece la venta", indicó Marcela, de pescadería García, en el mercado Escobedo.
Desde aquellos clientes que realizan sus pedidos con anticipación hasta aquellos que llegan espontáneamente a comprar, la venta de mariscos y pescados representa una tarea desafiante para los vendedores de los mercados de La Cruz y Escobedo.
Desde tempranas horas del día, estos comerciantes se levantan para preparar el producto fresco y estar listos para atender a todos los clientes que acuden en busca de sus productos.
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"Desde las 4 de la mañana ya estamos ahí pele y pele todo, acomodándolo, pesándolo, cargando el hielo. Es una friega. Nosotros vendemos todo en esta semana, se va volando, llega mucha gente. Es nuestra Navidad, sobre todo porque vienen de los restaurantes y negocios de mariscos, ahí se va una buena lana", declaró Martín Robles, de pescadería Los Amigos en La Cruz.
Los locatarios de estos mercados indican que aproximadamente el 30% de sus clientes son restaurantes de distintos tamaños, desde grandes establecimientos hasta pequeñas fondas, muchos de los cuales están ubicados en las cercanías de los mercados.