El embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, pidió este martes al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador a aprovechar las consultas técnicas bajo el capítulo de medidas sanitarias y fitosanitarias del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC) para solucionar las recientes acciones de México sobre biotecnología agrícola.
A través de una declaración difundida por la embajada estadounidense, el diplomático subrayó que estas consultas representan una oportunidad para resolver las preocupaciones de su país sobre las políticas biotecnológicas de México y subrayan el compromiso de la administración del presidente Joe Biden con un enfoque regulatorio basado en ciencia.
Puedes leer también: Cerveza, mezcal y pan dulce, entre los alimentos que más se exportan a EU: Sader
El gobierno mexicano se ha movido para limitar las importaciones y el uso de maíz transgénico estadounidense, diciendo que podría representar un peligro para la salud de los ciudadanos de la Nación. Estados Unidos afirma que la preocupación de México no se basa en la ciencia.
“Las consultas técnicas bajo el Artículo 9.19 del T-MEC ofrecen un mínimo de 30 días de diálogo previo a sostener procedimientos de resolución de disputas bajo el Capítulo 31 del T-MEC. No hay límite a la duración de estos diálogos si ambos gobiernos acuerdan continuarlos. Invito al gobierno de México a aprovechar esta oportunidad para ofrecer recursos y experiencia técnica necesaria para asegurar una resolución exitosa de estos importantes temas”, afirmó el embajador.
El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador emitió un nuevo decreto en febrero, en el cual se establece el uso, enajenación, distribución, promoción e importación de glifosato y maíz transgénico.
Con este nuevo decreto se instruye a dependencias y entidades del gobierno para que se abstengan de adquirir, utilizar, distribuir, promover e importar maíz genéticamente modificado (maíz transgénico), así como glifosato.
Los esfuerzos del gobierno mexicano para bloquear las importaciones de maíz transgénico estadounidense se han convertido en uno de los mayores irritantes comerciales entre México y su vecino del norte.