“La reforma laboral se va a dar”, expresó el presidente del Clúster de Plásticos de Querétaro, Arturo Nava Guerrero, expresó la preocupación de los empresarios, quienes temen una afectación en la productividad de las empresas y proponen una implementación gradual para facilitar la adaptación.
Señaló que con más de 110 empresas y una plantilla de alrededor de 90,000 trabajadores en Querétaro, el sector de plásticos se prepara para enfrentar los desafíos de la reforma laboral que reduce la jornada laboral a 40 horas y el reciente incremento salarial, que, sumados, representan un impacto acumulado de aproximadamente 60 días de trabajo adicionales por año.
“Hay un miedo, sobre todo entre las empresas extranjeras, que se refleja en el tipo de cambio y en la estabilidad de las inversiones. Las empresas mexicanas tendremos que adaptarnos, entender las circunstancias y buscar soluciones creativas para cubrir los requerimientos”, comentó Nava, resaltando la importancia de la flexibilidad para enfrentar los cambios.
Nava Guerrero explicó que la acumulación de reformas, como el aumento de días de vacaciones y el salario, hace que las empresas enfrenten un impacto significativo.
“No es fácil, tenemos que trabajar con mayor productividad para poder compensarlo”, añadió.
Asimismo, el presidente del clúster destacó que el gobierno estatal ha mostrado disposición para apoyar a la industria en su adaptación a estas reformas.
“Hemos tenido programas de capacitación y apoyo en innovación, pero es necesario fortalecer la colaboración con el gobierno federal para implementar políticas que estimulen la inversión en tecnología y aumenten la productividad”, indicó.
Con una gran cantidad de empresas asociadas al Clúster de Plásticos en Querétaro, que participan en sectores clave como la industria automotriz, aeroespacial, y de electrodomésticos, la reforma laboral plantea importantes retos para este sector estratégico de la economía del estado.
Arturo Nava hizo un llamado a los legisladores para que tomen en cuenta la realidad del sector productivo y busquen alternativas que permitan una implementación gradual de la jornada de 40 horas. Recordó que en países como Chile, el proceso fue gradual, lo cual dio tiempo a las empresas para adaptarse sin perjudicar su productividad.
El líder empresarial subrayó que el Clúster de Plásticos de Querétaro trabaja actualmente en programas para fortalecer la retención y desarrollo de talento humano.
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“Estamos por lanzar un programa de reforzamiento de capital humano para preparar al sector ante los cambios. Es la única manera en que podremos enfrentar las nuevas exigencias de la reforma laboral”, señaló.
Ante la inevitable transición hacia una jornada laboral de 40 horas, Nava Guerrero concluyó que el sector debe enfocarse en incrementar su eficiencia y competitividad, buscando alternativas para absorber los costos adicionales sin afectar la viabilidad de las empresas ni los precios al consumidor final.
