Estados Unidos pidió este jueves en una reunión de Naciones Unidas un "código de conducta no vinculante" sobre los sistemas de armas autónomos letales, conocidos como "robots asesinos".
"En nuestra opinión, la mejor manera de avanzar en nuestra reflexión (...) sería desarrollar un código de conducta no vinculante", declaró el representante estadounidense, Josh Dorosin, consejero jurídico del departamento de Estado.
"Este código ayudaría a los Estados a promover un comportamiento responsable y el respeto del derecho internacional", aseguró durante una reunión en Ginebra del grupo de expertos gubernamentales sobre los sistemas de armas autónomas letales.
La primera reunión oficial de este grupo de expertos, cuyo mandato está por terminar, tuvo lugar en 2017, sin que se encontrara un consenso sobre la necesidad o no de regular el uso futuro de estas armas.
Sin embargo, está previsto que el grupo publique recomendaciones después de su última reunión agendada entre el 2 y el 8 de diciembre, para preparar la conferencia de revisión de la Convención de Naciones Unidas sobre el Uso de Ciertas Armas Convencionales que se celebrará en Ginebra del 13 al 17 de diciembre.
Con este fin, el embajador belga Marc Pecsteen, que dirige las discusiones del grupo de expertos gubernamentales, preparó un informe que recomienda a los Estados que firmaron la Convención abrir las negociaciones para lograr normas internacionales sobre estas armas.
El informe también recomienda que los Estados se comprometan a ejercer un "control humano suficiente" mediante el establecimiento de salvaguardias.
Durante los debates del jueves, varios países, entre ellos Estados Unidos e India, se mostraron reacios a adoptar un marco jurídico vinculante y criticaron muchos aspectos del informe.
En noviembre de 2018, el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, pidió prohibir estas armas y las calificó como "políticamente inaceptables y moralmente repugnantes".