El uso de la Inteligencia Artificial para desarrollar tareas ha proliferado más entre los estudiantes, sin embargo, esto trae consecuencias éticas, legales y de desarrollo profesional, señaló Chorst Klaus, fundador de la app PLAG.ES que es utilizada para detectar plagios.
“Como vemos ahora, la mayor adopción se da entre los escolares. Los estudiantes universitarios tienden a ser un poco más conservadores, pero siguen utilizando la IA”, puntualizó.
Señaló que la inteligencia artificial generativa es una nueva tecnología que ya está ampliamente adoptada, y aunque pugnan porque su uso no sea prohibido, hay espacios como los entornos educativos en los que debe ser regulado.
“El menor esfuerzo de aprendizaje de los escolares da como resultado una menor competencia y una disminución de las perspectivas profesionales. Existe una creciente preocupación de que los niños, que son futuros médicos, periodistas o científicos puedan tener dificultades para completar su educación con éxito debido a la excesiva dependencia de la IA”, subrayó.
Enfatizó que la AI ayudará a acelerar procesos dentro de las empresas, y ejemplificó que entre los avances que podría aportar están el descubrimiento de nuevos fármacos, por lo que consideró que no hay razón para prohibir su uso.
Puntualizó que la Inteligencia artificial generativa crea contenido a partir de la información que ya han creado otros millones de personas, lo que podría generar copias textuales en los contenidos, y esto a su vez podría dejar repercusiones legales y sociales.
“Por lo tanto, corremos el riesgo de violar involuntariamente los derechos de autor de alguien. Y, por supuesto, esto puede tener consecuencias negativas en la imagen personal y en la carrera”, explicó.
Explicó que en el caso de la aplicación PLAG la desarrollaron para la detección de plagio a través de algoritmos específicos que encuentran las similitudes que podría tener un texto al compararlo con otros miles de millones de documentos.
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“Es como una búsqueda en Google pero que se hace a nivel masivo. El mecanismo se basa en modelos de IA. Entrenamos modelos de IA específicos que distinguen entre textos e indican la probabilidad de que el texto se escriba con la ayuda de la IA”, detalló.
Puntualizó que a través de esta aplicación la detección del uso de AI en el texto lo arroja en segundos, y para análisis de plagio podría tardar varios minutos.
