/ domingo 18 de octubre de 2020

“100 días para enamorarnos”, producciones en tiempos de Covid-19

Sofía Lama comparte cómo fue la grabación de la serie que pone a la vista tabúes, detrás de cámaras

La serie “100 días para enamorarnos” de la cual, puede verse la primera temporada en Netflix, fue una de las tantas producciones que vio alterado su calendario debido a la crisis sanitaria por Covid-19.

“Empezó en octubre del 2019, originalmente concluiría en abril del 2020, sin embargo, debido a la pandemia, las grabaciones tuvieron que detenerse en marzo, para finalmente regresar al set en mayo”, recuerda Sofía Lama, quien interpreta a Aurora.

Es por ello que esta primera entrega no tiene un final y será hasta que se lance la segunda temporada que pueda saberse el destino de los personajes.

“Fue difícil acoplarnos a los protocolos, obviamente hubo varios casos positivos, y pues como pudimos la terminamos, pero creo que quedó padrísima (…) Había escenas donde nos teníamos que abrazar y nos poníamos de manera horizontal, es decir, en realidad abrazábamos al aire, y ya en edición los cortaban, y como hubo varios casos positivos de actores, obviamente se tuvieron que ir a su casa como dos semanas, por ello grabábamos con dobles, donde se viera solamente el hombro de ese actor y la peluca, ya cuando el actor podía regresar al set, se grababan todas sus escenas en green screen. Fue toda odisea, pero nos reímos mucho porque hay que tomarlo con humor”, relata Lama.

Asimismo, comparte que el costo para producir en medio de la pandemia es caro, pues todos los días de llamado les realizaban dos pruebas a los actores –la instantánea y la de laboratorio–. “Teníamos que llegar a las 7 de la mañana al estudio para pasar a nuestras pruebas, te decían negativo en la instantánea y nos metíamos a trabajar, pero creo que lo hicieron muy bien porque así estábamos todos tranquilos”.

¿De qué trata?

La historia ancla de esta serie parte de tres matrimonios: el exitoso económicamente, los talentosos y artistas que viven de manera limitada, y la aparente “pareja perfecta y feliz”, de la cual Sofía juega un papel importante.

“La relación que yo interpreto es la de un señor bígamo, que también existe porque ¿cuántas mujeres no hay en México, cuyos maridos tienen doble vida y dos familias?, pero ellas se enteran muchos años después. Aunque es una realidad que se vive todos los días, sigue siendo un tema tabú”, relata.

Abundando en Aurora, a quien da vida, dice que es importante dar a conocer este tipo de temas, ya que su personaje dejó de lado su carrera profesional y toda su vida para dedicarse a su casa, mientras que la otra esposa, Jimena, continuó ejerciendo como abogada, lo que –en la historia– le permite salir adelante.

“Es importantísimo y sobre todo en México, donde el machismo sigue siendo un tema tan delicado; nos va a costar mucho quitarnos de esta cultura tan arraigada, pero poco a poco”, confía.

Grandes compañeros

Para Sofía, la clave del éxito de esta producción es el guion, pero también el elenco. “Esta serie había sido muy exitosa en Argentina, pero yo sabía que eran muy importantes las dos protagonistas y al enterarme de que serían Ilse Salas y Mariana Treviño, automáticamente dije que sí, además siempre había querido trabajar con Andrés Almeida, y luego me encontré con actores jóvenes que me sorprendí muchísimo con su trabajo, como María Elena Dávila, Macarena García y Fer Urdarivieta”.

Con respecto al elenco juvenil destaca el “maravilloso trabajo” de Macarena al interpretar a una chica que es transgénero, que se descubre a sí misma en su paso por la preparatoria, donde sufre bullying de sus compañeros, tocando así más temas tabúes.


La serie “100 días para enamorarnos” de la cual, puede verse la primera temporada en Netflix, fue una de las tantas producciones que vio alterado su calendario debido a la crisis sanitaria por Covid-19.

“Empezó en octubre del 2019, originalmente concluiría en abril del 2020, sin embargo, debido a la pandemia, las grabaciones tuvieron que detenerse en marzo, para finalmente regresar al set en mayo”, recuerda Sofía Lama, quien interpreta a Aurora.

Es por ello que esta primera entrega no tiene un final y será hasta que se lance la segunda temporada que pueda saberse el destino de los personajes.

“Fue difícil acoplarnos a los protocolos, obviamente hubo varios casos positivos, y pues como pudimos la terminamos, pero creo que quedó padrísima (…) Había escenas donde nos teníamos que abrazar y nos poníamos de manera horizontal, es decir, en realidad abrazábamos al aire, y ya en edición los cortaban, y como hubo varios casos positivos de actores, obviamente se tuvieron que ir a su casa como dos semanas, por ello grabábamos con dobles, donde se viera solamente el hombro de ese actor y la peluca, ya cuando el actor podía regresar al set, se grababan todas sus escenas en green screen. Fue toda odisea, pero nos reímos mucho porque hay que tomarlo con humor”, relata Lama.

Asimismo, comparte que el costo para producir en medio de la pandemia es caro, pues todos los días de llamado les realizaban dos pruebas a los actores –la instantánea y la de laboratorio–. “Teníamos que llegar a las 7 de la mañana al estudio para pasar a nuestras pruebas, te decían negativo en la instantánea y nos metíamos a trabajar, pero creo que lo hicieron muy bien porque así estábamos todos tranquilos”.

¿De qué trata?

La historia ancla de esta serie parte de tres matrimonios: el exitoso económicamente, los talentosos y artistas que viven de manera limitada, y la aparente “pareja perfecta y feliz”, de la cual Sofía juega un papel importante.

“La relación que yo interpreto es la de un señor bígamo, que también existe porque ¿cuántas mujeres no hay en México, cuyos maridos tienen doble vida y dos familias?, pero ellas se enteran muchos años después. Aunque es una realidad que se vive todos los días, sigue siendo un tema tabú”, relata.

Abundando en Aurora, a quien da vida, dice que es importante dar a conocer este tipo de temas, ya que su personaje dejó de lado su carrera profesional y toda su vida para dedicarse a su casa, mientras que la otra esposa, Jimena, continuó ejerciendo como abogada, lo que –en la historia– le permite salir adelante.

“Es importantísimo y sobre todo en México, donde el machismo sigue siendo un tema tan delicado; nos va a costar mucho quitarnos de esta cultura tan arraigada, pero poco a poco”, confía.

Grandes compañeros

Para Sofía, la clave del éxito de esta producción es el guion, pero también el elenco. “Esta serie había sido muy exitosa en Argentina, pero yo sabía que eran muy importantes las dos protagonistas y al enterarme de que serían Ilse Salas y Mariana Treviño, automáticamente dije que sí, además siempre había querido trabajar con Andrés Almeida, y luego me encontré con actores jóvenes que me sorprendí muchísimo con su trabajo, como María Elena Dávila, Macarena García y Fer Urdarivieta”.

Con respecto al elenco juvenil destaca el “maravilloso trabajo” de Macarena al interpretar a una chica que es transgénero, que se descubre a sí misma en su paso por la preparatoria, donde sufre bullying de sus compañeros, tocando así más temas tabúes.


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