Antes de la tercera llamada bailan, respiran y se preparan para salir al escenario a bailar, cantar y divertirse a través de una obra que tiene como objetivo principal mostrar que los sueños se pueden hacer realidad. Es Billy Elliot. El musical, la puesta que les ha permitido dar este mensaje; una obra que después de un año en temporada en la Ciudad de México, emprendió una gira y hará su cuarta parada en el auditorio Josefa Ortiz de Domínguez.
Basada en la película homónima y con una dramaturgia de Lee Anderson, la obra está situada durante el mandato de Margaret Thatcher, bajo el contexto de la huelga de los mineros que tuvo lugar de 1984 a 1985. Billy Elliot es una historia inspiradora sobre un pequeño niño y su constante lucha en contra de las adversidades y los estereotipos para lograr hacer su sueño realidad.
“Hay luchar para que nuestros sueños se hagan realidad”, coincidieron los jóvenes actores Mauricio Arriaga y Anthon Mor, Billy y Michael en la obra, respectivamente. Como nueva generación buscan a través de este musical inspirar a otros niños a seguir sus sueños tal y como Billy, tal y cómo ellos lo hicieron con este musical.
Ambos formaron parte de la selección de 29 niños que comenzaron su preparación en una academia que la misma producción realizó para este montaje. Durante más de 11 meses los jóvenes se prepararon y contendieron para ganarse el papel protagónico de la puesta, de los cuales fueron cinco los afortunados que alternan funciones desde febrero del 2017.
Ninguno de los dos había tomado clases de danza antes, Arriaga asegura que tampoco solía cantar, “en la academia aprendí a todo y entendí que cada coreografía expresa algo”, dijo durante rueda de prensa en la ciudad.
El protagonista si bien describe este papel como una experiencia inolvidable, reconoce que no ha sido fácil por las diferentes facetas emocionales que tiene su papel en escena, “pero he aprendido de Billy a luchar por los sueños. Yo no me había dado cuenta de la discriminación hacía el ballet, hay muchos niños que no se atreven a bailar por los prejuicios, ha inspirado a muchas personas y definitivamente hay que hacer esto para que la gente haga lo que le gusta”, destacó.
Como cuarta experiencia en el teatro musical, la primera actriz Norma Lazareno participa en el papel de la abuela de Billy y también asegura que a través de esta obra también busca darles un mensaje a los adultos y las familias en general, “yo les diría a los adultos que no porque piensen que el abuelo fue doctor, debe seguir el mismo rumbo. Sino que cada quien debe seguir sus pasiones, ir hacía eso que te mueve, pero claro, siempre buscando ser el mejor en lo que sea que hagas”, agregó.
A lo largo de este año junto al elenco, se refirió al elenco joven con respeto, “al principio te inspiran ternura y cariño, pero cuando los ves en el escenario, nace el respeto hacia ellos, ya no hay una actuación que pueda haber comparación con los que tienen mucha tiempo. Me nutro de su juventud e ímpetu”, mencionó.
La actriz describió este proyecto como ambicioso, caro y perfeccionista en el buen sentido para ofrecer algo de calidad al público, “cuando las cosas están bien echas no hay épocas, la gente te agradece porque está pagando, habrá quienes no pueden pagarlo, pero quienes sí e inocentemente se sientan y esperan que les des algo que cumpla con la expectativa y que valga lo que pagó y tanto le costó ahorrar, pero al minuto que empieza la obra, el público se integra por completo”, dijo.
Durante este mes que va del 2018, la producción emprendió una gira que contempla presentaciones en Guadalajara, Monterrey, -ciudades que ya agotaron y a las que volverán, Puebla, Estado de México y Querétaro.
La presentación aquí será el próximo 24 de febrero con dos funciones, 17 y 20:30 horas. Los boletos están a la venta a través de E-ticket desde los 520 hasta los mil 610 pesos.