El músico británico Elton John y su exesposa, Renate Blauel, han resuelto una disputa legal que les enfrentaba, sobre un acuerdo que les prohibía a ambos hablar abiertamente de su matrimonio, según confirmó este miércoles un representante del cantante.
Blauel, técnica de sonido alemana, había demandado a principios de año a su exmarido por haber quebrado supuestamente dicho pacto, que ambos firmaron tras su divorcio en 1988, después de cuatro años de matrimonio.
Inicialmente ella solicitó a la Justicia un mecanismo legal con el que evitar filtraciones públicas futuras, así como una compensación en concepto de daños y costes por un valor estimado de unos 3 millones de libras (3,28 millones de euros).
"Ambas partes se complacen en anunciar que han resuelto este caso, de forma que se reconoce la necesidad de privacidad de Renate", comentó hoy el portavoz de Sir Elton.
En cuanto a la demandante, agrega la misma fuente, "Blauel reconoce que Elton ha actuado de forma digna y respetuosa hacia ella en los últimos 30 años y siempre ha estado contento de ayudarla".
"No hablarán el uno del otro, ni de su matrimonio, en el futuro y no harán más comentarios sobre este caso", añadió.
En el momento en que se separaron, en 1988, ambos firmaron un contrato que incluía una cláusula para evitar que ninguno de los dos hablara abiertamente de sus años de casados o del motivo que llevó a su separación.
A comienzos de este año, Blauel demandó a su exesposo por infringir "de manera repetida y flagrante" dicho pacto en su libro de memorias publicado en 2019, así como en su película biográfica "Rocketman", también difundida ese mismo año.
El equipo legal de Sir Elton rechazó dicha acusación bajo el argumento de que los detalles aireados en el libro y en la película ya eran de dominio público, y arguyendo que dicho contrato "solo se aplica en asuntos privados y confidenciales".
En su demanda, Blauel aludía en concreto a cinco de las escenas que salían en el citado filme, donde se mostraba el día de su boda con el cantante así como el hecho de que ambos dormían en habitaciones separadas.
Otra de esas escenas muestra al músico en una sesión de terapia de grupo hablando del fracaso de su matrimonio a causa de su propia "infelicidad y en particular de su sexualidad", según la querella.