Washington, (Notimex).- El cantante mexicano Juan Gabriel tuvoun singular homenaje póstumo en la capital estadunidense, alrecibir la dedicatoria principal del altar de celebración del Díade los Muertos en el Instituto Cultural de México enWashington.
Enmarcado con las tradicionales flores de cempasúchil, unretrato de “El Divo de Juárez” coronó los peldaños de unaltar que, a pesar de la media luz, resplandeció con loscontrastes cromáticos de veladoras y de un repertorio selecto decalaveras, calacas y catrinas.
Juan Gabriel compartió el honor con otros cuatro mexicanosfallecidos recientemente: el arquitecto Teodoro González de León,los escritores Luis González de Alba e Ignacio Padilla y lacoreógrafa Gloria Contreras.
“Este año México perdió a muchos grandes de la cultura ylas artes (...) Debe haber habido muchos otros pero pensamos queson los más importantes que México ha perdido en el ámbito delas artes este año”, dijo a Notimex el director del Instituto,Alberto Fierro.
Como expresión cultural, la celebración del Día de losMuertos en Washington cobró un relieve especial, en momentos queMéxico y los mexicanos han sido tema recurrente en la campañapresidencial del republicano Donald Trump.
“Es fundamental demostrar que México no es lo que ha dichoesta persona, sino que somos un país heredero de lascivilizaciones mesoamericanas, con una riqueza cultural yartística impresionante”, manifestó Fierro.
Cientos de personas, incluidos ciudadanos mexicanos,estadunidenses y de otros países, abarrotaron el Instituto en lainauguración oficial del evento, que se ha convertido en unatradición anual para los residentes del llamado Distrito deColumbia.
Protegida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desdehace una década, la fiesta del Día de Muertos tiene la virtud detransmutarse cada año y convertirse en una ocasión singular yúnica.
Miembros del Servicio Exterior Mexicano integraron un cuartetode música de cámara y se llevaron las palmas con su ejecuciónmagistral de “La Bruja” y “La Llorona”, mientras otrosdiplomáticos se ataviaron a la usanza típica del Día de losMuertos.
“Queríamos que fuera algo muy representativo, nuestraintención era transmitir este espíritu que tenemos del día deMuertos, algo que está tan arraigado a la cultura mexicana”,mencionó Tania Amaya, de la embajada de México.
Para Sergio Méndez, otro miembros del servicio exterior, es unafaceta más del trabajo diplomático de mostrar lo mejor deMéxico.
“Tenemos un amor profundo por México, por nuestrastradiciones, porque es una manera de apropiarnos de nuestra propiacultura y mostrarlo en este país”, señaló.
Pero ninguna celebración del Día de Muertos está completa sinla degustación del pan tradicional azucarado, acompañado por suchocolate caliente.
Con pan y chocolate en mano, la música, las cadencias, asícomo los colores y sabores de una de las más icónicas y místicascelebraciones mexicanas conquistaron así los corazones y lospaladares de propios y extraños.