“Recordemos que todos somos agentes de cambio, recordémoslo a través de las historias”, expresó el cineasta mexicano Guillermo del Toro, en una charla que presidió en plataformas junto a su homólogo, Alfonso Cuarón.
Organizado por la Universidad de Guadalajara a beneficio de organizaciones sin fines de lucro, el conversatorio virtual “Monstruos y silencios: Narrativas para un siglo turbulento”, sirvió a los ganadores del Óscar para recordar algunos momentos de sus carreras, así como para compartir su visión política y estética actual.
"Estamos viviendo un momento de devastación y de división, constantemente nos están diciendo todo lo diferentes que somos, hay una destrucción de la unidad muy fuerte, por todos lados", dijo Del Toro al referirse al “clima de miedo” que prevalece en el ámbito social, político, económico y sanitario, y que se ha acentuado con la presencia de la pandemia de Covid-19.
Ante esta situación, el ganador del Óscar 2018 por “La forma del agua” manifestó sentirse preocupado por la juventud y las condiciones a las que se tienen que enfrenta ahorar: “la generación joven es la que constantemente está en mi cabeza (…) ¡qué difícil es ser joven en este momento”, dijo.
Sin embargo, Cuarón se mostró más optimista, destacando que, pese a todo, las nuevas generaciones tienen la posibilidad de “pensar lo impensable”.
"Es una generación que es muy vibrante y con todas las adversidades que está viviendo está encontrando posibilidades (...) Nosotros desde el punto de vista del miedo no lo vamos a pensar", señaló el director del multipremiado filme "Roma" (2018).
Destacando el papel de la narrativa en la configuración de la realidad, Cuarón afirmó que en el contexto actual hay una disrupción de la narrativa, “una narrativa que se ha fragmentado”, y que es importante volver a unir y darle densidad simbólica.
En concordancia, Del Toro subrayó la importancia de la narrativa para entender el mundo y lo que acontece, de ahí la importancia de hacer cine, y de la defensa de una pluralidad de visiones en este arte.
“Es imposible no existir en la narrativa, desde que salimos al mundo entendemos todo con narrativa”, añadió.
Haciendo una remembranza de sus trayectorias, los cineastas hicieron un recuento de sus éxitos y derrotas, así como de sus nuevas aspiraciones dentro del cine.
"Lo que yo busco son dos cosas: la vida y los otros", aseguró Del Toro sobre sus intenciones actuales, mientras que Cuarón hizo énfasis en su interés por el conjunto simbólico de las películas más allá de los detalles narrativos y técnicos.
En la charla también recordaron aquellas experiencias en el plató y fuera del set, que los ayudaron a fortalecer su amistad; como cuando Del Toro motivó a Cuarón a filmar "Harry Potter y el prisionero de Azkaban" (2004), así como viaje que realizaron juntos en auto de Francia a Italia.
"Mi amistad con Alejandro y contigo (Cuarón) ha sido esencial, es una confirmación de que al final de la vida lo único que te quedan son los compas (amigos) y el pacto entre los tres es siempre decir la neta (verdad), muchas veces de manera abrupta", apuntó del Toro.
Del Toro se ha convertido en uno de los directores mexicanos más queridos por el público por su constante labor social, sus duras críticas ante las injusticias y los gobiernos, así como por su interés por impulsar la cultura en México con la creación de becas y apoyos a jóvenes que buscan espacio en la industria cinematográfica.
Por su parte Cuarón, cuenta con cinco estatuillas de los premios de la Academia por dos de sus películas más recordadas, "Gravity" (2014) y la multigalardonada "Roma" (2018), cinta que, entre otras cosas, tuvo repercusiones en las leyes mexicanas para garantizar los derechos de las trabajadoras domésticas y se convirtió en un emblema contra el racismo y el clasismo en México.
Con información de AFP y EFE