Diego de Erice, actor y conductor mexicano, se ha vuelto tendencia estas últimas semanas por su participación dentro de la conducción del exitoso reality show, La Casa de Los Famosos, y por su papel protagónico en la narco-comedia, El Junior: el mirrey de los capos.
En entrevista, el artista comparte su experiencia en ambos proyectos, principalmente en La Casa de los Famosos, un show que replica el formato de El Gran Hermano, pero en el que compiten 14 famosos entre estos Wendy Guevara, una influencer trans que ha logrado robarse el corazón de millones de televidentes.
¿Cómo ha sido tu experiencia dentro de éste programa?
Muy muy enriquecedora, en realidad es un proyecto que a mí me suma muchísimo y que ha tenido un alcance sumamente espectacular. El poder conectar con tanta gente, el poder tener una plataforma que llega a tantas personas es una enorme responsabilidad, pero sobretodo es gratificante para uno ver que, tanto en la actuación como en la conducción, los productores, las audiencias y las personas con las que trabajo confían en mí, porque son proyectos enormes.
En el caso de La casa de los famosos, poder estar en la mente de los productores para conducir un programa de esta naturaleza a lado de Galilea, Pablo Chagra, Odalys Ramírez, quienes tienen una trayectoria increíble, me da una alegría enorme, porque me permite seguir avanzando en la carrera de la conducción.
¿También asumes un personaje al momento de estar frente a la conducción?
Tanto en la actuación como en la conducción la creatividad está presente, pero me parece que tienen retos diferentes. El abordar la conducción para mí ha simbolizado y ha llegado a darme muchísimas herramientas para tratar al mundo exterior, con mi gente, con mis amigos, con el público.
Como conductor te enfrentas a retos relacionados con cómo conducirte o mostrarle en la tele porque obviamente no va a ser igual a como somos en nuestra vida privada. Claro que en nuestro día a día no somos iguales a como nos comportamos en nuestra área de trabajo.
¿Cómo ha sido la recepción del público ante estos diversos proyectos en los que estás participando actualmente?
Me considero muy afortunado porque siempre la comunicación que he tenido con el público ha sido buena. Todos los personajes que he hecho han sido muy bien recibidos, aceptados, las críticas han sido buenas y ahora en mi papel de conducción, bueno, también he tenido apoyo desde los primeros proyectos que conduje hasta llegar ahora a este paso tan importante que he dado con La Casa de los Famosos.
Este último proyecto en particular lo que pasa es que polariza mucho la opinión y el fanatismo, entonces obvio que cuando hablas del equipo contrario, pues habrá algunos fans que se molesten y busquen generar movimientos en redes sociales, pero respecto a mi trabajo pues la verdad yo estoy muy contento y los resultados han sido buenos.
¿Qué hay sobre tu protagónico en la serie El Junior?
[El Junior: el mirrey de los capos] es un proyecto muy divertido. Es una serie de comedia, la primera narco comedia que se realiza y es una historia de 18 episodios que tiene como fin burlarse un poco y parodiar a los narcos.
Hemos tenido una muy buena respuesta por parte del público, hemos ido estrenando un episodio por semana y los comentarios han sido muy buenos. La gente se siente atrapada por Emiliano Quintana [personaje que interpreta] y todas las cosas que le van sucediendo a través de los capítulos, el poco conocimiento que tiene del negocio.
Es una sitcom muy divertida y pues parece que está atrayendo la atención necesaria para iniciar a platicar sobre una segunda temporada.
¿Qué es lo que consideras que la diferencia del resto de las series que se han hecho en torno al narcotráfico?
Considero que lo hace único es el cómo lo abarca. A diferencia de otras series donde ya hemos visto esta temática, [El Junior] le da un giro completamente diferente. Es un reto el poder verlo y de alguna forma quitarle lo tenso y duro de la temática, y, en términos peyorativos, esta serie busca hacerlo ligero, liviano y, obviamente, divertido.
¿Consideras que este personaje, de alguna forma, te está dejando una enseñanza?
Por supuesto, la capacidad de adaptación. Siempre es positivo rescatar que los personajes, si bien sí te dejan algo, tú también dejas algo en ellos. Y en el caso de éste personaje, me deja justo esta reflexión de que no importa en qué escenario te encuentres, debes ser como un camaleón y fluir.
¿Consideras que Emiliano Quintana es diferente a los demás personajes que has realizado o que de alguna forma se enlaza con ellos?
Hay muchas veces que los personajes tienen virtudes similares, sin duda. Aunque me toque interpretar a dos abogados, van a ser distintos aunque tengan la misma línea de trabajo, los dos tendrán aspectos en común pero también se diferenciarán.
Ya me ha tocado hacer personajes que es vital tratar de separarlos al momento de interpretar a Emiliano Quintana. Puede que tengan muy poco parecido, pero el personaje que realicé al inicio de mi carrera, Leonardo Ruizpalacios [de la novela, Que pobres tan ricos] también era un mirrey. Pero ahora es como que otro género y otra atmósfera en la que se desenvuelve el personaje, así que sí trato de distinguirlos, aunque obvio, hay aspectos que no puedo evitar imprimir en todos mis personajes como lo es mi humor, porque ese viene de mí y yo nunca dejó de ser el mismo.
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Erice se encuentra activo en la pantalla chica desde el año 2010. Dentro de su trayectoria se destaca su participación dentro de la telenovela, Qué pobres tan ricos del 2014, con el personaje de Leonardo Ruizpalacios. Además ha sido artista invitado en el programa de comedia, Me caigo de risa.
