Bajo la dirección de Hernán Goldfrid y Pablo Fendrik “Eljardín de bronce” es el regresó de las producciones argentinasa HBO después de casi una década. La serie de ocho capítulosapuesta a un lenguaje cinematográfico actual y con la expectativade estar a la altura de otras producciones extranjeras.
Con un elenco integrado por Joaquín Furriel, Luis Luque,Julieta Zylberberg, Gerardo Romano, Romina Paula, Mario Pasik,Claudio da Passano y Alan Sabbagh, entre otros. Además, la seriecuenta con la actuación especial de Norma Aleandro y DanielFanego, la serie basada en el libro de mismo nombre escrito porGustavo Malajovich, sigue la desesperada lucha del arquitectoFabián Danubio por recuperar a su hija, quien ha desaparecido deforma inexplicable y sin dejar rastro. Ante la falta de respuestasde la policía, toma en sus manos una búsqueda que se convierte ensu motor, dándole un objetivo que lo obsesionará sin descanso. Esuna historia entrecruzada en la que las líneas deinvestigación.
“Los espectadores no pueden soportar una semana más, losfinales el suspenso que se viven, eso es lo que realmentebuscábamos, hacer sentir mucho suspenso y deseo de saber qué eslo que sigue”, refirió en entrevista Hernán Goldfrid. Estaserie se convirtió en la primera producción latinoamericana enestrenarse de manera simultánea en 50 países, motivo por elcual Goldfrid destacó que buscaron contar un policial que sedesarrollara en Buenos Aires, hacer de este país un personaje másallá de convertirla en una producción local, “a nadie le esindiferente el secuestro de una niño, algo que estoy seguro nosólo es acá en la Argentina Lo que nosotros queríamos era contarun policial que se desarrollara en Buenos Aires, un personaje.Filmar en locaciones que fueran visibles arquitectónicamente tantopara el ojo concordar como para el ojo del espectador que no conocela capital”, completó Pablo Fendrik.
A través de este thriller, ambos directores apostaban a generarun contenido que estuviera a la altura de produccionesinternacionales “lo que queríamos era ver una serie como esasque nos gustan ver, nunca nos preguntábamos como eran otras,queríamos hacerlo en la que nos sintiéramos espectadores y aldisfrutamos como otras series extranjeras”, apuntaron.
Con los nuevos avances tecnológicos y formas de ver latelevisión, señalaron que la generación de contenidos no se hacomplicado, “abordamos la serie con un lenguaje moderno porquesomos espectadores de lo que se está produciendo ahora,prácticamente lo que hacemos es trasmitir lo que sabemos que es ellenguaje audiovisual actual (…) Cada cosa debe generar elsuspenso y terror” dijo Fendrik.
Tras la respuesta obtenida por parte del público, señalaronque existe el deseo de hacer una segunda temporada de la cualincluso ya trabajan en el texto, “la serie está basada en laadaptación de una novela y no hay una segunda parte, se estátrabajando en un desarrollo que sin lugar a dudad utilice granmaterial anterior pero que esté al nivel de una gran temporada”,finalizaron.
