El actor Juan Manuel Bernal se pondrá en la piel de Damián, un gobernador de la Villa Rica de Veracruz, en la serie de época “Sitiados”, que se estrenará este viernes 26 de julio, a través de Fox Premium, y que cuenta con un elenco conformado además por Alfonso Herrera, Eréndira Ibarra, Roberto Sosa y Julio Bracho, entre otros.
En este papel, Juan Manuel fue elegido para representar a un hombre que él mismo define como “retorcido”. “La verdad es divertido interpretarlo, pero sí es un hijo de su tal por cual, es un personaje muy ambicioso y retorcido y eso me gusta, porque no se trata de hacer el malo –villano–, sino de encontrarle la carnita y las debilidades a un personaje que está lleno de poder y ambición”, explica.
Así mismo confiesa que se encontró con un guión tan bien escrito, que no tuvo que explorar mucho para construir el personaje. “Simplemente fue ponerse en el papel y montarse esos vestuarios increíbles, bordados a mano por expertos, y dejarnos llevar por la maravillosa caracterización de los directores de imagen, vestuario y todo lo que se requiere para transportarnos a la Nueva España del siglo XVII”.
Abunda que la serie habla sobre españoles, piratas e indios, cuestión que le emocionó y luego de pasar el casting, aceptó gustoso, sin embargo, el proceso de filmación no fue sencillo, ya que menciona, incluso tuvo que compaginar con un jaguar.
Explicó que por tratarse de una producción de época, hubo que recrear todo, incluso las texturas y los pisos porque todo cambia. “Es un trabajo de primera con una serie que puede competir con cualquiera del mundo, entonces eso requiere de mucho esfuerzo y concentración”.
Otro de los retos a los que se enfrentó el actor, fue a la forma de moverse al caminar y comer, porque no era como ahora, además de tolerar el calor, ya que el vestuario fue confeccionado en terciopelo, que es un textil muy grueso y algunas de las locaciones fueron en Veracruz, pero al final se dice satisfecho y orgulloso por el resultado.
Más selectivo
Luego de 33 años de carrera, Juan Manuel confiesa que se ha vuelto muy exigente con la selección de sus proyectos y personajes. “Me gustan lo proyectos que me retan y me obligan a crecer, que me ponen en la orillita del riesgo y esta no fue la excepción, aunque creo que hay muchas historias todavía por contar”, dice luego de haberse puesto en la piel de galán, villano, corrupto y hasta un padrecito.
Con respecto a su futuro, Bernal asegura que le gustaría volver a hacer algo de época, ya sea en cine, teatro o serie porque le gusta transportarse y tratar de entender la filosofía y las circunstancias por las que pasan los personajes que se encuentran en un tiempo determinado de la historia.
Finalmente, adelanta que lo que veremos en Damián tiene tintes que bien pueden identificarse con características de los políticos actuales, “aunque estén vestidos del siglo XVII, pareciera que esos no cambian”, concluye entre risas.