Sin las filas largas ni las multitudes acostumbradas antes de la pandemia, se abrieron las puertas del Nuevo Estadio Olímpico de Querétaro, para recibir a cientos de seguidores de Hombres G.
Al ingresar a las instalaciones de este espacio polideportivo, ubicado frente a la Alameda Hidalgo, el público fue recibido por un primer filtro sanitario donde les fue solicitado un comprobante completo de vacunación, o en su caso, una prueba PCR.
Una vez cumplidos los protocolos, y de manera ordenada, los asistentes fueron ocupando sus lugares, esperando el tan ansiado concierto de la banda española , que por fin pisó el escenario pasadas las 20:30 horas.
Con “No sé cómo lo vamos a hacer “ de su nuevo disco “La esquina de Rowland” iniciaron el espectáculo, caracterizado por una coreografía de luces de colores y proyecciones que fueron presentadas en sincronía con las canciones.
“¿Cómo están chicos? ¡qué gusto verles! estamos encantados de estar aquí y compartir esta noche (...) Vamos a cantar algunas canciones de nuestro disco nuevo, un disco precioso que se llama 'La esquina de Rowland’ y también todas esas canciones que nos han acompañado durante toda nuestra vida... en cualquier caso, ¡la vamos a pasar de ‘puta madre’!”, gritó eufórico David Summers, vocalista de esta agrupación de rock pop en español, fundada en Madrid en 1982.
La noche transcurrió entre canciones como “Voy a pasármela bien”, “El ataque de las chicas cocodrilo”, “Se me sale el corazón”, “Lo noto” y “Te quiero”, un tema que, desde su lanzamiento en 1986, los músicos no han dejado de tocar en sus presentaciones.
“Con la vida ya rota, con poco que perder, la cerveza en la mano, como antes de ayer, con las manos heladas, el alma empapada, intento correr, pero me quedo en `La esquina de Rowland´, otra vez”, cantó Summers, no si antes invitar al público a pensar en el bar de sus vidas: “todos tenemos un bar donde nos emborrachamos por primera vez”, dijo al público, compartiendo que Rowland es un bar en Madrid donde Hombres G acostumbraba a ir en su juventud y aún hoy suelen hacerlo.
Sobre la pantalla, los músicos proyectaron extractos de algunas canciones como “Marta tiene un marcapasos” para animar el canto colectivo de los fans, quienes pronto abandonaron sus asientos para bailar al ritmo de todas las rolas.
Al término del concierto, los comerciantes locales no desaprovecharon la oportunidad de ofrecer a los aficionados playeras, tazas, bolsas y un sinnúmero de artículos estampados con la leyenda de la nueva gira y los rostros de los artistas.
Entre la gente, Alfonso Pedraza compartió su alegría de ver de nuevo a su banda favorita en escena: “Crecí con ellos y me marcaron”, aseveró y relató que también estuvo presente en el concierto que tuvieron en Ciudad de México como parte de su nuevo tour.
Y es que, de acuerdo con el aficionado queretano, ya se ha vuelto una tradición para él asistir a sus conciertos: “En el 87 que vinieron por primera vez a México y yo estuve ahí; recuerdo que fue en el Palacio de los Deporte… desde entonces llevo siguiéndolos toda su vida como agrupación”, asintió satisfecho.
Tras ausentarse de los escenarios por la pandemia de Covid-19, Hombres G inició su nueva gira por México a través de ocho ciudades, en las que además de Querétaro fueron incluidas Monterrey, Puebla, Ciudad de México, Coahuila, San Luis Potosí, Aguascalientes y Guadalajara.