Juan es conocido como conductor de cápsulas del Canal 5 y relata que aunque su idea siempre ha sido ser actor, la vida lo llevó por otro camino que le dejó grandes experiencias; actualmente retoma su sueño y ya tiene grandes proyectos en puerta.
“Realmente estudié actuación, pero por azares del destino las cosas se fueron tornando hacia la conducción, pero siempre estuve pendiente y tratando de seguir mi carrera como actor. La verdad disfruté mucho la etapa en Canal 5 y Comedy Central”, comparte con su característico estilo desenfadado y asegura que aprendió mucho y tuvo la oportunidad de viajar, conocer gente, así como asistir a festivales de cine y música.
Ahora que está del otro lado del micrófono –como entrevistado–, dice que el reto es transmitir y comunicar sobre sus proyectos, además de permitir que la gente lo conozco un poco más.
Cuenta con la bendición
Para arrancar esta nueva etapa, empieza con el pie derecho, ya que el 2 de septiembre saldrá a la luz la serie “Alma de ángel” de 13 capítulos, a través de Televisa; una comedia protagonizada por Niurka Marcos, donde además colaboran Julio Bracho, Raúl Araiza y Verónica Jaspeado, entre otros.
“Niurka, que interpreta a Alma fallece, pero su alma se queda en casa, entonces llega el bien y el mal, donde yo represento al bien con mi personaje ‘Uriel’, e intentamos llevarnos su alma, pero antes de irse, ella tiene que ayudar a su familia y sobre todo a su marido, a rehacer su vida”, detalla Juan y agrega que la contraparte, el mal, es personificado por la actriz Verónica Jaspeado.
Con respecto cómo fue trabajar con una persona tan controvertida como Niurka, el actor la reconoce como un gran ser humano y una excelente compañera. “Es una mujer muy generosa, dentro y fuera de escena, es súper profesional y siempre está al pendiente de uno y de ella misma. Hay una anécdota que sucedió en la comida de los llamados; Julio Bracho decía que es de esos proyectos donde nadie quiere que acabe, porque la verdad todos estábamos muy contentos y logramos hacer una sinergia muy bonita, fue súper disfrutable”, puntualiza.
Sin embargo, en la vida real Ugarte confiesa que más bien elegiría asumirse en un equilibrio entre el bien y el mal.