Desde Santo Domingo, República Dominicana, la cantante Karla Breu asegura que debido a la contingencia mundial por el Covid- 19 se ha quedado en casa acompañada de su familia e invita a la gente a sacar lo mejor de estos momentos.

“Les quiero decir que tengan mucha paciencia porque todavía falta un tiempo, pero sé que pronto vamos a poder solucionar todo esto (…) Disfruten de lo positivo que ha traído esto, por ejemplo, el tiempo en familia; esta cuarentena me ha enseñado a valorar estos momentos cerca de los míos”, dice.

Asimismo detalla que en su país se han impuesto fuertes restricciones. “Hay toque de queda desde las 5 de la tarde hasta las 6 de la mañana del día siguiente, todos los días, y a las personas que violan la instrucción se las llevan y los ponen a hacer trabajo comunitario como limpiar calles (…) Para entrar a los supermercados obligatoriamente se debe acudir con guantes y mascarilla”.

En tanto, asegura que ha aprovechado estos momentos para componer, leer y hasta grabar covers, labor para la que se apoya en sus padres.

“Mientras estoy aquí en mi casa, obviamente mis días son muchísimo más tranquilos que cuando estoy en México en gira de promoción; cuando me despierto hago un poco de yoga, tomo clases con mi couch de canto de México en línea, también estoy leyendo, ahora mismo el libro Paula de Isabel Allende. Trato de mantenerme ocupada y aprendiendo cosas nuevas”, explica.

Biografía musical

Por otra lado, Breu confiesa que la trayectoria que ha emprendido a lo largo de su carrera se ha convertido en un diario que describe sus vivencias y desde que decidió entrar a la industria de la música, ha compartido cada paso con sus fans.

“He ido creciendo con mis canciones, pero creo que también fui evolucionando con ellas y para mí es algo especial poder ir enseñando el proceso de mi crecimiento –en todos los aspectos– a través del arte, porque para cada etapa de mi vida he tenido un sencillo distinto”, dice a propósito de sus temas “Mi amor”, “Cada vez”, “No me arrepiento” y el más reciente, “Vuelve”.

Todos estos acercamientos musicales han tenido como hilo conductor el amor, aunque se trata de historias independientes, ya que considera que es un sentimiento universal. “Me gusta hablar del amor porque siento que en el mundo pasan muchas cosas feas y es como darnos un respiro a todo lo que sucede, además hay muchas formas de experimentarlo, no solamente en pareja, también puede ser de un amigo, con la familia y hasta la música”.

Recuerda que el primer obstáculo al que se enfrentó en esta carrera fue a sus propios miedos, mismos que tuvo que hacer a un lado para lograr lo que ella llama “dar el salto de fe”.

“Estaba saliendo de la adolescencia y todos sabemos que es una etapa súper confusa, por eso tenía muchos miedos e inseguridades porque yo pensaba que no iba a poder lidiar con la industria de la música y al principio fue difícil, pero luego me di cuenta que todo era por el miedo al cambio y a crecer”.

Finalmente celebra que tras abrirse paso, se ha encontrado con el escenario y la mejor de las experiencias que es que la gente cante sus canciones y le compartan que se sientan identificados con su música.