El pasado fin de semana, jóvenes raperos se reunieron en las inmediaciones del Río Querétaro, como parte de la primera clasificatoria local para el torneo Sobredosis de Freestyle Internacional, que se realizará este año en Ecuador.
El evento fue organizado por Rap Masters League, una agrupación queretana conformada en 2018, con el objetivo de consolidar al estado entre los principales exponentes de este estilo musical, emergido en los 70 como parte del movimiento contra cultural del Hip Hop.
A partir de las 15:30 horas, cerca de 100 jóvenes se congregaron en un auditorio al aire libre, semicircular, ubicado al margen de Avenida Universidad, que, por su forma, fue bautizado por los freestyleros como el Coliseo.
Cual gladiadores, 35 raperos se enfrentaron en una batalla rítmica de freestyle, utilizando a la palabra como escudo y principal arma: “Yo soy la prosa de la evolución, y no soy Sherlok para que me digas Homs”, espetó un MC a otro frente a los jueces Bully, Zeo, Suicida, Richi y Doger, quien en esta primera etapa, seleccionaron Axxthert como el ganador.
Resistencia en la copla
“Venimos huyendo de los inspectores”, confiesa entre risas Carlos Bershash Ash; un MC y productor musical queretano, que junto con otros raperos locales, decidió conformar en 2018, a esta organización.
“Primero lo hacíamos en Jardín Zenea, luego nos fuimos a Santa Clara, y posteriormente aquí, donde llevamos apenas dos fechas; a ver cuánto nos dura… pues, aunque siempre hemos tratado de mantener un ambiente sano, porque luego la gente trae alcohol o se droga, y de evitar esos problemas para continuar con esto, los inspectores nos piden un permiso… Si hemos tratado de sacarlo, pero nos solicitan personal de seguridad, que para controlar a toda la gente; les da miedo el tipo de personas que venimos aquí”, asegura Bershash, quien describe al rap como un estilo de música que sirve de canal y que se presta para hacer catarsis, “es una manera de sacar lo que traemos dentro, de compartirlo a manera de que nos entiendan, porque hablando normal a veces no podemos expresar lo mismo que cuando rapeamos”, ¿Y de qué hablan cuando lo hacen?
“Hablamos de muchas cosas, de lo que vemos, de lo que vivimos. La mayoría de nosotros pasamos por lo mismo; crecimos en la calle, en bandas; con violencia y drogas… así que es una manera de distraernos y apartarnos de eso. De animar a otros compañeros que están en malos pasos, a venir aquí e intentarlo diferente, porque hay generaciones atrás que jamás pudieron salir de ese círculo”, lamenta, y agrega que otro de los incentivos que anima a los jóvenes a rapear son los premios, pues los MC que participan en las competencias pagan entre 50 y 100 pesos de inscripción, y quien se hace acreedor al primer lugar, se lleva todo el acumulado.
Aunque en la competencia no se observó la participación de mujeres, el organizador aseveró que si fueron invitadas, “incluso se acordó que se les cobraría una cuota menor para motivarlas… pero no vinieron”.
Entre los queretanos, también estuvieron presentes MCs de Acapulco y Celaya; la mayoría no mayor a los 30 años, quienes con la ilusión de llegar a la final en la Ciudad de México, al ritmo de los beats citaron entre sus coplas el incendio de la Catedral de Notre Dame de París, y hasta la reciente liberación “de la Mijangos”.