Con más de una década de trayectoria en la industria de la comedia, la standupera mexicana Alexis de Anda ha utilizado el humor para abordar temas importantes y tal vez polémicos, como el consumo de la cannabis, el poliamor y el feminismo.
A pesar de las dificultades propias de la industria, ha logrado posicionarse como una de las iniciadoras del movimiento del standup en México y se ha presentado en importantes festivales como el Vive Latino y Coordenada, en Netflix tiene su propio especial llamado Mea Culpa y para el 2023 ya planea una nueva rutina que le permita salir de gira.
“En 2023 voy a empezar a escribir un nuevo show de comedia, empezar a crear un a nueva rutina para empezar a girar, además de mi podcast El viaje que ya lleva tres años, quiero empezar nuevos programas, tengo una propuesta con un comediante de Venezuela y Colombia, siento que me toca ir a otros países y trabajar con otras culturas y formas de pensar”, señala.
En entrevista para DIARIO DE QUERÉTARO, la comediante reflexiona sobre el papel que actualmente ocupan las mujeres en la comedia y cuales aún son las dificultades que las comediantes enfrentan sobre el escenario.
¿Cómo ves el papel de las mujeres en la comedia? ¿Se han abierto espacios?
Ha sido un camino que no ha sido fácil porque al final esta industria está basada en el machismo y los hombres que dirigen todo, es un medio que no sido fácil para las mujeres, porque nos toca trabajar de noche, trabajar en bares, espacios que no siempre son seguros y sientes que tienes que hacer este doble esfuerzo para ganarte el lugar. Las mujeres sentimos esa necesidad de comprobar, algo que los hombres ya dan por sentado, nosotras tenemos que hacer una doble lucha por creernos que nuestra palabra vale, que nuestra voz es importante, que no nos quieran pagar menos, hay muchas capas en el techo de cristal, pero lo bonito es que en tantos años que llevo haciendo stand up de las cuatro comediantes que éramos cuando yo empecé, ahorita ya hay 50, entre más y menos profesionales pero veo que existen más y más espacios seguros, más propuestas y más shows, se va abriendo más este camino para nosotras, nos vamos ayudando, somos sororas y nos apoyamos, ojalá que en algún momento ya no sintamos que hay que hacer un doble esfuerzo para ganarnos la mitad de lo que gana un hombre.
¿Entonces las propias mujeres han abierto el camino para las nuevas comediantes?
Totalmente, yo le dije una vez a Anabel Ferreira “gracias a que tú caminaste yo puedo correr”, si ella no se hubiera echado la época más dura del machismo y representado a las mujeres en ese momento de la comedia, como “La chupitos” y otras mujeres, con personajes a lo mejor muy arquetípicos y un poco caricaturescos, sin ellas no estaríamos aquí y yo no habría entrado en el stand up, ellas labraron el camino pero además inspiraron a las nuevas mujeres en la comedia, para mí fue inspirador ver a Anabel y espero que yo sea inspiradora para otras, estoy muy orgullosa de lo que hemos hecho.
¿Cuáles siguen siendo los retos para las mujeres en la comedia?
Yo creo que mucho es el creérsela, creer en nosotras, en nuestra palabra, hablar de lo que queremos hablar porque a veces da miedo, empiezas hablando de cosas como burlándote de ti misma, echándote para abajo, antes veía yo mucho de este tipo de comedia, la hacía y la veía con frases como “esque estoy sola”, “estoy soltera”, etc, ese tipo de discursos y ahorita ya veo mucho empoderamiento en sus discursos, eso es lo que necesitamos, elevarnos, inspirarnos, porque siempre hay esta voz adentro diciendo ¿y si no eres tan chistosa? y cuando estas en un bar con 20 hombres enterosexuales que están en su club de Toby pues también puede eso, se necesita mucho valor para subir al escenario y ser perseverante noche tras noche.
Entonces el standup sirve para mandar mensajes importantes…
Totalmente, es una gran plataforma y si ya la tienes y la gente ya te está mirando y escuchando, la puedes aprovechar para hacer chistes de la fila del banco o puedes aprovecharlo para hablar de temas que realmente te importan y que trascienden.