María Josefina Cruz tiene 93 años, hace unos días acaba de graduarse como Licenciada en Administración, actualmente estudia un diplomado en pedagogía y tiene planes para estudiar otra licenciatura; esta es la historia de la abuelita universitaria que asegura que cuando hay voluntad todo es posible.
La historia de María Josefina se dio a conocer cuando su nieta Maricruz compartió orgullosa en Twitter que su abuelita había concluido su carrera universitaria con excelentes calificaciones.
Los tuits de @RsMaricruz iban acompañados de unas fotografías de una abuelita feliz, ataviada con toga y birrete.
La abuelita universitaria conversó desde Querétaro con EL SOL DE TAMPICO a quien le compartió su siguiente meta.
NACIÓ EN MEDIO DE LA GUERRA CRISTERA
María Josefina Cruz Blancas y García, nació en 1928 en Tulancingo Hidalgo, fue la hija mayor de los 7 hijos que concibió el matrimonio de Elvira y Adrián, su llegada al mundo se dio en medio de la guerra cristera, cuando ser católico era prácticamente castigado con la muerte entre los años 1926 y 1929.
“Cuando era la época persecución religiosa, me bautizaron en casa porque estaban cerrados los templos, me bautizaron a escondidas y esa fue mi primera historia”, dijo
Explicó que al ser la mayor inicialmente sólo pudo estudiar la primaria, después realizó una carrera comercial y tras contraer matrimonio con Alfonso, fue él quien la convenció de abrir una academia y se convirtió en maestra
“La novedad era la máquina de escribir puse una academia comercial Me sentí muy orgullosa porque mis alumnos encontraron buenos empleos en Tulancingo”, apuntó.
A los 60 años y tras enviudar, María Josefina se mudó con su familia a Querétaro donde concluyó los estudios de secundaria y nuevamente dio clases de taquigrafía y mecanografía, aunque siguió con el bachillerato un día fue a su escuela y se topó con la sorpresa de que había cerrado.
Fue hasta que para motivar a que su nieta mayor estudiara la preparatoria abierta que decidió inscribirse con ella, por lo que juntas terminaron este nivel.
“NO ME HICIERON 'BULLYING'”
La abuelita, explicó que durante su etapa como estudiante del bachillerato hubo quien le advirtió que podría ser víctima de burlas por su edad.
“Tenía más de 80 fue una experiencia muy bonita. Yo no recibí ningún rechazo, ninguno, eso como le llaman 'bullying'. Siento que la gente que entró llevaba ese entusiasmo o necesidad de concluir su preparatoria”, señaló.
Una vez concluido este nivel, María Josefina entró en una encrucijada ¿Qué carrera estudiar? ¿Educación y Administración?.
“Yo no sabía qué hacer, cuando me iba a inscribir dijo la secretaria que yo tenía beca completa para administración, claro que yo la acepté”, señaló la mujer que concluyó la carrera en 3 años con calificaciones de 9 y 10.
A la par que estudió administración, María Josefina hizo un diplomado en Teología.
“Su pasión es la iglesia, temas bíblicos, es católica; siempre ha tomado muchos cursos y hasta daba clases, mientras estaba en la licenciatura estuvo tomando un diplomado por 2 años, muy pesado, con muchas tareas”, agregó su nieta Maricruz.
BUSCA BECA PARA ESTUDIAR TEOLOGÍA
El gran sueño de la abuelita estudiante es convertirse en Licenciada en Teología por lo que su familia busca una beca que le permita superar este nuevo reto académico.
“Su sueño es estudiar la licenciatura en teología, es lo que queremos ver, dónde y cómo, ese es un mayor sueño, queremos ver si conseguimos alguna beca”, señaló Maricruz.
La joven que describe a su abuelita como luchadora y trabajadora, explicó que mientras se encuentra una escuela para la nueva carrera, ella se aplica en el nuevo diplomado.
“La universidad que la becó le dijo 'usted puede tomar lo que quiera en nuestra universidad. Ella es la más responsable, es la primera en conectarse en zoom o en llegar cuando había clases presenciales”, apuntó.
EL QUE QUIERE ESTUDIAR, LO HACE
Para la abuelita universitaria, concluir su primera carrera fue alcanzar un sueño, sin embargo, advierte que para estudiar se requiere de voluntad.
“El que quiere busca la oportunidad; el que no quiere, no. Es muy difícil o yo soy muy pesimista, los que de veras queremos estudiar no importa su condición económica, ni su edad, ni su tiempo, aunque tenga otras ocupaciones como un trabajo, ve cómo salir adelante con su estudio. Si no hay voluntad siento que es imposible moverlos, no aprecian, ahí siento que me tropiezo con una piedrita”, agregó.
María Josefina Cruz, quien tiene 7 hijos, 14 nietos, 9 bisnietos y una tataranieta 2 años, está sorprendida de que por sus logros ha sido entrevistada desde países como Argentina, Honduras y Estados Unidos, es humilde, cree no merecerlo.
“Es algo inmerecidamente , les agradezco, que sirva no de ejemplo, ¿verdad? No puedo decir eso pero sí como motivación a alguien que quiera seguir estudiando”, finalizó.