Ana Yolanda López Domínguez, fundadora de Pan Q’Ayuda, transforma vidas desde su cooperativa en la colonia San Pablo, Querétaro. En silla de ruedas, dirige este proyecto que emplea a personas con discapacidad, adultos mayores y mujeres cabeza de familia.
En un estado donde el 7 % de la población tiene alguna discapacidad, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), esta iniciativa cobra especial relevancia al generar oportunidades para uno de los sectores más vulnerables.
"Soy Ana Yolanda López Domínguez, directora de Pan Q Ayuda, una cooperativa que genera empleo para personas con discapacidad, abuelitos y mamás cabeza de familia. Fabricamos y vendemos pasteles, galletas, postres, bocadillos, canapés, Pan de Muerto y, por supuesto, rosca de Reyes".
El proyecto inició en 2007 como una asociación civil con una escuela de oficios y en 2012 se consolidó como cooperativa, especializada en panadería y repostería gourmet.
La cooperativa elabora panes, galletas, pay, dulces, brownies y pastelería, contribuyendo a la integración social de sus empleados. López Domínguez explicó: “Nuestro propósito es abrir caminos para quienes enfrentan barreras. No es solo empleo, es inclusión y dignidad”.
Cada integrante de la cooperativa participa en diferentes etapas de la producción. Las personas con discapacidad realizan labores específicas según sus capacidades, lo que garantiza un proceso de trabajo inclusivo. Además, ofrecen capacitación continua en técnicas de panadería y repostería, asegurando que cada producto sea de alta calidad.
“El trabajo en equipo es fundamental para nosotros. Todos aportan y todos aprenden, lo que nos permite no sólo hacer buenos productos, sino también crecer como personas y comunidad”, destacó López Domínguez.
De acuerdo al INEGI, en 2023, la población con discapacidad en México ascendió a 8.8 millones de personas, de las cuales el 46.5 % son hombres y el 53.5 % mujeres.
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Las entidades con mayores concentraciones de personas con discapacidad son Zacatecas (11.2 %), Tabasco (10.1 %) y Durango (9.9 %), mientras que Coahuila (5.2 %) y Chiapas (5.9 %) registran los índices más bajos.
En este contexto, Pan Q’Ayuda no solo representa un espacio laboral, sino también una iniciativa que promueve la inclusión de personas que, debido a su condición, enfrentan mayores dificultades para incorporarse al mercado laboral.