Adoptan camellón y dan vida a un jardín

En un espacio aproximado de 15 por 5 metros, en un camellón frente a su casa sobre prolongación Pasteur, la señora Alejandra Romero empezó a sembrar plantas endémicas

Alejandro Payán Vázquez

  · lunes 22 de abril de 2019

La señora Alejandra riega las plantas diariamente. Foto: Hugo Camacho

Para cambiar el mundo y el entorno sólo hace falta una actitud diferente y propositiva, en el marco del Día Mundial de la Madre Tierra hay que destacar la historia de una mujer que toma acciones concretas y con resultados positivos, adoptó un camellón árido para crear un jardín que brinda una mejor imagen y un punto de belleza en la ciudad.

En un espacio aproximado de 15 por 5 metros, en un camellón frente a su casa sobre prolongación Pasteur, la señora Alejandra Romero empezó a sembrar plantas endémicas, es decir locales que no necesitan mayores cuidados para adaptarse al medio, más que agua.

El camellón luce más bello con las plantas y bancas.

En su mayoría el agua que usa para regar este pequeño espacio es reciclada, proviene del lavado de manos, que no tiene ni detergentes, ni es agua negra, es agua de limpieza o que no está tan contaminada, pues ella se hace cargo de reutilizar el vital líquido y evitar un gasto mayor.

Con bancas improvisadas hechas de madera reciclada, este jardín brinda sombra suficiente donde incluso la gente se reúne para convivir durante la tarde, hay camelinas, jacarandas, laureles, pirules, nopales, maguey, sábila, cactáceas, guayabas, higos, durazno, más de 100 plantas, todas especies endémicas de la región.

La gente se puede sentar a disfrutar la sombra en los días calurosos.

Este espacio empezó a ser diseñado hace seis meses después de la inauguración de esta avenida, donde la señora Alejandra le pidió permiso al personal de Servicios Públicos y le dijeron que lo hiciera sin ningún problema.

“Me gusta lo verde, se ve bonito, no tengo ningún interés, no importa que la gente corte, pero que lo disfrute, las frutas o las flores, no importa quiero que se vea bonito”.

Los comentarios de quien pasa por la zona o de los vecinos son positivos, halagan el trabajo realizado por la señora Alejandra, que sin ningún compromiso o interés se encarga de desmalezar, regar y mantener limpio el espacio.

“Yo sé que la mayoría de personas no somos conscientes al cortar un árbol, son años de vida, no somos responsables, si el gobierno quiere, viene y lo corta, pero no importa yo tengo la satisfacción de que lo sembré y lo disfruto, la gente pasa y se toma fotos, entonces sí el gobierno hace algo ni modo no estaríamos pensando en nosotros ni el futuro de nuestros hijos”, afirmó.

Sobre la preocupación de los ecologistas por el corte de árboles para realizar obras en distintos puntos de la ciudad, doña Alejandra asegura que es bueno, pero también se pueden tomar acciones en cada casa y en los hogares para prevenir el daño al medio ambiente.

“Si cada quien cuidáramos un árbol en nuestros frentes, Querétaro y la ciudad sería otro y generaría más salud para nosotros, colocar en el frente de nuestra casa un árbol que no perjudique las paredes y las banquetas este mundo sería otro mundo”, finalizó.