Durante el primer semestre del año se registraron seis carpetas de investigación por el delito de feminicidio mientras que en el mismo periodo de 2020 se habían reportado dos.
En el secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, la Fiscalía General del estado reportó entre enero y junio ese número de carpetas de investigación.
Fue en enero cuando se reportó una carpeta de investigación, en febrero no se abrió ninguna, en marzo hubo un caso, en abril otro, en mayo dos casos, y en junio fue otro caso.
Los asesinatos fueron uno con arma de fuego, uno con arma blanca y cuatro con otro elemento, de acuerdo con los datos oficiales.
En tanto, durante 2020 fueron 11 feminicidios los registrados en el estado, y en el primer semestre se reportaron dos casos, la mayoría cometido con “otro elemento”.
En el Código Penal del Estado se establece el delito de feminicidio como “Al que prive de la vida a una mujer por razones derivadas de su género”. Y la penalidad es de 20 a 50 años de prisión, así como de 500 a 750 días de multa.
Las razones de género que se consideran en los casos es que la víctima presente signos de violencia sexual, le hayan infligido lesiones o mutilaciones infamantes, marcas degradantes o actor de necrofilia.
Además si hubo amenazas, acoso o lesiones en contra de la víctima, si el cuerpo fue expuesto, depositado o arrojado en algún lugar público, paraje o exhibido.
También si hay antecedentes de cualquier tipo de violencia familiar, laboral, escolar o vecinal; y si la víctima estuvo incomunicada previo a que la privaron de la vida.
Y si “la víctima sufrió violencia física ejercida por persona con la que la haya tenido parentesco por consanguinidad, por afinidad o civil, relación de matrimonio, concubinato, noviazgo o amistad o de subordinación o superioridad que impliquen confianza”.
