De acuerdo con el primer artículo de la Ley Orgánica del Ejército y Fuerza Aérea -como instituciones armadas permanentes- dentro de las cinco misiones generales está el realizar acciones cívicas y obras sociales que tiendan al progreso del país y en caso de desastre prestar ayuda para el mantenimiento del orden, auxilio de las personas y sus bienes, así como la reconstrucción de las zonas afectadas.
Para dar cumplimiento a estas misiones es que se estableció el Plan de Defensa Nacional que se denominó DN III-E con el que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) refrenda el compromiso con la ciudadanía para apoyarla en todo momento sea el fenómeno natural o eventualidad que se presente.
Con motivo del Día del Ejército, la 17/a Zona Militar a través del Primer Regimiento Blindado a cargo del teniente Fabián Sánchez compartió que en Querétaro se cuenta con una fuerza militar capacitada permanente de 28 elementos que en la entidad particularmente atienden incendios e inundaciones, aunque también están capacitados para apoyar en sismos y derrame de sustancias químicas.
“Estamos capacitados para coordinarnos con otros instituciones u organizaciones y apoyar cualquier fenómeno perturbador de inmediato en beneficio de la población civil. El número de militares que apoya depende de la contingencia que se atiende, así como los materiales y vehículos que nos acompañan en la jornada y la capacitación es constante”.
HISTORIA
El teniente Fabián Sánchez compartió que la Sedena puso en marcha por primera vez el Plan DN III-E vez en octubre de 1966 durante la emergencia causada por el desbordamiento del río Pánuco que afectó a los estado de Tamaulipas y Veracruz.
Ante la falta de una Secretaría, institución u organización que auxiliara en zonas de desastre, es que el poder Ejecutivo federal giró la orden a la SEDENA para implementar y establecer un plan de auxilio a la población civil en casos de desastre.
FASES DE CAPACITACIÓN
Fabián Sánchez indicó que el Plan DN III-E cuenta con la fase de prevención en donde dentro del cuartel los militares se preparan y llevan su adiestramiento desde lo teórico hasta la práctica, ya que todo el plan está normado y regulado con protocolos que se aplican a nivel nacional. Esta fase de capacitación es durante toda una semana, no obstante la capacitación es continua ya que todos los elementos aprenden cada rol, además de mantener la condición para apoyar a la población en cualquier momento.
La fase de auxilio, ellos lo denominan así cuando el personal está en activo apoyo, en donde además de las labores que se designa a cada elemento militar paralelamente proporcionan seguridad en el área de contingencia para evitar saqueos o robos en casa habitación, es decir velan por los bienes de la población.
Mientras que la fase de recuperación es cuando terminan las acciones de contingencia, pero se continúa con la reconstrucción de la comunidad, zona o entidad afectada, con lo que se da cumplimiento a la última parte de la V misión que textual dice: “en caso de desastre prestar ayuda para el mantenimiento del orden, auxilio de las personas y sus bienes, así como la reconstrucción de las zonas afectadas”.
ROLES MILITARES
Dentro del Plan DN III-E establece que una persona debe ser la encargada de mantener la comunicación con el escalón superior para mantenerlo informado de lo que pasa en el área afectada y sus alrededores, debido a que cuando se presenta un fenómenos natural por lo regular las comunicaciones móviles y telefonía celular colapsa, comentó el teniente Fabián Sánchez.
Dentro del equipo también contempla un binomio (humano-canino) para la localización de personas en casos de sismo que trabaja en conjunto con los militares encargados de búsqueda y rescate.
También están los elementos que conforman el equipo de apoyo al trabajo que con los que ayudan interinstitucionalmente para el rescate de las personas lesionadas y los que se encargan del control de albergues, quienes deben de registrar a todas las personas con edad y domicilio, así como ser los responsables de establecer las normas para convivencia sana dentro del mismo.
SERVICIO DE SANIDAD
El encargado de la célula de servicio de sanidad para llevar a cabo el plan es el subteniente Santiago Velázquez, egresado de la Escuela Militar en donde también se imparten cursos de medicina táctica militar para la atención de siniestros, allí adquirió la licenciatura en salud pública y emergencias médicas.
“Nosotros nos encargamos de brindar atención médica prehospitalaria bajo la clasificación de cuatro colores básicos: verde para pacientes que no está en riesgo su vida; amarillo para pacientes críticos con altas probabilidades de vida; rojos los que necesitan atención hospitalaria y los negros que se refiere a los fallecidos”.
El subteniente Velázquez compartió que cuentan con dos camillas rígidas, tabla para RCP, dos botiquines y uno individual para atender hemorragias vía aérea, además de contar con una ambulancia de emergencias básicas, es decir para traslado y estabilización del paciente mientras se llega a un hospital.