Durante el resto de la semana se esperan temperaturas altas de hasta 35 grados centígrados, informó Javier Amaya Torres, titular de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC) en el estado de Querétaro, por lo que recomendó a la población tomar las medidas necesarias para evitar afectaciones en la salud.
Agregó que además se pronostica un 50 por ciento de probabilidades de chubascos tormentosos en la zona sur y parte centro de la entidad, así como lluvias dispersas en la zona metropolitana y serrana.
El funcionario estatal mencionó que se mantiene el cielo medio nublado con temperaturas mínimas de 16 grados centígrados y máximas de hasta 33 grados en el día.
“Sin embargo, debido a la presencia de una tercera ola de calor en la mayor parte del país, la cual afecta desde el viernes de la semana pasada se estima que en Querétaro pueda subir la temperatura hasta los 35 grados centígrados en los próximos días y prevalezcan las altas temperaturas hacia el fin de semana, principalmente en zona metropolitana, centro y sur de la entidad”, afirmó.
Agregó que habrá vientos ligeros a moderados máximos de 25 kilómetros por hora, mientras que en la zona serrana la temperatura oscilará entre los 17 y 34 grados centígrados.
En San Joaquín y en Pinal de Amoles descenderá, ya que la mínima será de 11 grados y la máxima de 25, expresó Amaya Torres.
Con relación a las recomendaciones que deben seguirse por parte de la ciudadanía, el coordinador de Protección Civil en el estado argumentó que la exposición a las altas temperaturas por un período prolongado puede generar pérdida de agua en el cuerpo.
Indicó que de hacer caso omiso ante tal situación que se espera en el estado de Querétaro, esto puede poner en riesgo la salud, generar situaciones de insolación, desmayos, deshidratación y hasta enfermedades en la piel que luego pueden acarrear situaciones más delicadas.
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Por lo pronto, Javier Amaya Torres dijo que se recomienda a la población evitar exponerse a la radiación solar por tiempos prolongados, tratar de hidratarse adecuadamente, así como poner atención especial en enfermos crónicos, niños y adultos mayores.
También, seguir las recomendaciones de las autoridades y mantenerse informados sobre las condiciones del clima, además de hacer uso responsable de la línea de emergencias 9-1-1 para reportar de manera inmediata cualquier emergencia.