/ martes 7 de agosto de 2018

Ambientalistas demandan proteger ejido de Colón

Ambientalistas estatales y la diputada Antonieta Puebla demandaron proteger un ejido de Colón, cercano a la Universidad de Arkansas, al declararlo zona de protección o amortiguamiento, luego de que colonenses pidieron el apoyo del próximo gobierno federal por la intención del gobierno municipal de convertir esos terrenos en zona para el desarrollo industrial, de vivienda y para un campo de golf.

Se trata de un predio sobre el que existía un compromiso “de palabra” del gobierno estatal anterior para declararlo una zona de reserva, pero la administración municipal de Colón pretende incluirla en los planes de desarrollo industrial, a pesar de que organizaciones ambientales identifican ese punto por tener variedades de flora semidesértica.

La diputada Antonieta Puebla explicó que existe una amenaza sobre el ejido La Zorra por la construcción de dos grandes desarrollos inmobiliarios que impactarían unas 210 hectáreas, por lo que exhortó a las autoridades estatales federales revisar el caso.

“Que se observe que no se dañen las hectáreas de reserva y que se cumplan con los debidos permisos previos a fraccionar y no después, como el caso del basurero que primero otorgan la autorización y después enmiendan los permisos”, dijo la legisladora.

A finales de julio el presidente municipal de Colón, Alejandro Ochoa, anunció la construcción de lo que llamó el proyecto inmobiliario, comercial y habitacional más grande del municipio, que se edificaría sobre tres mil hectáreas de La Zorra, La Esperanza y San José Peñuela, a sólo cinco minutos del Aeropuerto Intercontinental de Querétaro, con una construcción de 25 mil viviendas en los próximos 15 años. En la misma zona se construye otro desarrollo de vivienda muy amplio.

Puebla Vega denunció que uno o dos días antes de las elecciones, se realizó una asamblea con ejidatarios de La Zorra donde supuestamente representantes de las autoridades municipales les prometieron “entregar un cheque que podrían cambiar más adelante”.

A la par de que habitantes de Colón pretenden obtener el compromiso del próximo gobierno federal de que se declare como zona natural protegida, la activista María del Carmen Siurob informó que existía esa misma promesa por parte del gobierno estatal anterior.

“Era parte de los espacios que se iban a dejar como conservación, pero al llegar la Universidad de Arkansas se quiere desarrollar. Está amenazado porque los desarrolladores quieren instalar infraestructura. Había un compromiso a mediados del gobierno estatal anterior, no sé qué pasó, se suponía que se iba a hacer. Lo que siempre hemos dicho es que debe haber zonas de amortiguamiento en todo, si ahí está el aeropuerto, la Universidad, debe existir una zona de amortiguamiento”, insistió.

Este fin de semana los representantes de habitantes de Colón, Armando Hernández y Saula Martínez acudieron a la casa de transición del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, para dejar la petición de proteger el predio y prometieron regresar esta semana para obtener el apoyo en favor de la protección ambiental de la zona.

La petición busca que se declare los terrenos como zona natural protegida, porque se sabe que existe interés del gobierno municipal de venderlos para desarrollar un campo de golf y naves industriales.

Ambientalistas estatales y la diputada Antonieta Puebla demandaron proteger un ejido de Colón, cercano a la Universidad de Arkansas, al declararlo zona de protección o amortiguamiento, luego de que colonenses pidieron el apoyo del próximo gobierno federal por la intención del gobierno municipal de convertir esos terrenos en zona para el desarrollo industrial, de vivienda y para un campo de golf.

Se trata de un predio sobre el que existía un compromiso “de palabra” del gobierno estatal anterior para declararlo una zona de reserva, pero la administración municipal de Colón pretende incluirla en los planes de desarrollo industrial, a pesar de que organizaciones ambientales identifican ese punto por tener variedades de flora semidesértica.

La diputada Antonieta Puebla explicó que existe una amenaza sobre el ejido La Zorra por la construcción de dos grandes desarrollos inmobiliarios que impactarían unas 210 hectáreas, por lo que exhortó a las autoridades estatales federales revisar el caso.

“Que se observe que no se dañen las hectáreas de reserva y que se cumplan con los debidos permisos previos a fraccionar y no después, como el caso del basurero que primero otorgan la autorización y después enmiendan los permisos”, dijo la legisladora.

A finales de julio el presidente municipal de Colón, Alejandro Ochoa, anunció la construcción de lo que llamó el proyecto inmobiliario, comercial y habitacional más grande del municipio, que se edificaría sobre tres mil hectáreas de La Zorra, La Esperanza y San José Peñuela, a sólo cinco minutos del Aeropuerto Intercontinental de Querétaro, con una construcción de 25 mil viviendas en los próximos 15 años. En la misma zona se construye otro desarrollo de vivienda muy amplio.

Puebla Vega denunció que uno o dos días antes de las elecciones, se realizó una asamblea con ejidatarios de La Zorra donde supuestamente representantes de las autoridades municipales les prometieron “entregar un cheque que podrían cambiar más adelante”.

A la par de que habitantes de Colón pretenden obtener el compromiso del próximo gobierno federal de que se declare como zona natural protegida, la activista María del Carmen Siurob informó que existía esa misma promesa por parte del gobierno estatal anterior.

“Era parte de los espacios que se iban a dejar como conservación, pero al llegar la Universidad de Arkansas se quiere desarrollar. Está amenazado porque los desarrolladores quieren instalar infraestructura. Había un compromiso a mediados del gobierno estatal anterior, no sé qué pasó, se suponía que se iba a hacer. Lo que siempre hemos dicho es que debe haber zonas de amortiguamiento en todo, si ahí está el aeropuerto, la Universidad, debe existir una zona de amortiguamiento”, insistió.

Este fin de semana los representantes de habitantes de Colón, Armando Hernández y Saula Martínez acudieron a la casa de transición del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, para dejar la petición de proteger el predio y prometieron regresar esta semana para obtener el apoyo en favor de la protección ambiental de la zona.

La petición busca que se declare los terrenos como zona natural protegida, porque se sabe que existe interés del gobierno municipal de venderlos para desarrollar un campo de golf y naves industriales.

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