Francisco Javier forma parte del 47.1 % de queretanos que prefieren recibir atención médica privada que acudir a una institución de gobierno, bajo el argumento de que en los lugares de paga recibe mejor medicamento y la curación lleva menos tiempo.
Y es que de acuerdo con la Encuesta Nacional Dinámica Demográfica (ENADID), el 27.1 % del total de la población de 2.5 millones de habitantes así decide ir a un consultorio, clínica u hospital privado. Mientras que otro 20 por ciento decide atenderse en los consultorios de las farmacias de las colonias.
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La cifra precisa que se tiene registro de 2 millones 519 mil 794 habitantes. De éstos, 683 mil 210 acuden a consultorios, clínicas u hospitales privados, y 503 mil 875 a consultorios de farmacias.
Por otro lado, el estudio revela que quienes van al IMSS son 632 mil 186 personas, en tanto los que van al ISSSTE son 48 mil 119.
En un recorrido realizado por Diario de Querétaro, es notoria la presencia de gente que prefiere asistir con el médico de una farmacia que hacerlo en el IMSS o ISSSTE.
El hombre, quien se desempeña como guardia de seguridad, compartió que hace un par de meses tuvo una infección severa en la garganta la cual le duró más de dos semanas. Fue entonces cuando acudió a la Clínica 16 del Seguro Social.
“Me dieron un medicamento que no me hizo nada, no me ayudó en nada. Mejor fui al consultorio de una farmacia que está frente a mi trabajo y ahí, aunque pagué 450 pesos más los 200 que le di al médico por la consulta, me curé más rápido”, expresó Francisco Javier.
Mencionó que no es la primera vez que se ve en la necesidad de visitar un médico en un consultorio particular, ya que, para él, ir al Seguro Social es tardar hasta tres horas sin la confianza de que puedan proporcionarle la medicina que sea efectiva para curar su malestar.
“Es muy pesado ir al Seguro Social, porque lo que quiere uno es que lo atiendan rápido, porque va uno muy mal en ocasiones. Entonces, lo que hacemos es pasar a una farmacia y que nos atienda el médico de ahí, para que nos dé algo rápido".
Y es que, de acuerdo con la Encuesta Nacional Dinámica Demográfica, el porcentaje de personas que acuden al IMSS para una consulta son el 25.1 por ciento del total de la población que es de 2.5 millones de personas. En tanto que quienes van al ISSSTE por alguna causa son solamente el 1.9 por ciento.
Es por eso que para Francisco Javier lo mejor es asistir a un hospital o consultorio privado, al argumentar que es más rápido el proceso de mejoría, sobre todo si se trata de algo que no sea grave o ponga en riesgo su vida.
“He ido al Seguro Social para hacerme un estudio de sangre, pero me dan cita para dentro de un mes o mes y medio. Si voy a un consultorio de farmacia, me dan la orden para ir al laboratorio y en una semana por lo mucho ya tengo el resultado para que me diga el médico qué es lo que tengo”, comentó.
De igual manera expuso su inconformidad por el esquema de trabajo con el que se atiende en el IMSS, debido a que se tiene que llegar demasiado temprano para poder ser atendido en el consultorio que le corresponde.
“Si no alcanzas te mandan a la unifila y a esperar unas tres horas. Creo que es mucha la demanda de la población cada día para el número de médicos que tiene el Seguro Social. Por cierto, no es mala la atención, pero no alcanzan a atender bien a los pacientes”, refirió Francisco Javier.
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Añadió que al acudir con un médico particular éste se da más tiempo para tomar temperatura, pesar a la persona, y hacer una revisión general más minuciosa, lo que, dijo, no sucede en un hospital o clínica de gobierno.
Para Francisco Javier cada vez es más común que las personas decidan atenderse en los consultorios privados, sobre todo para no esperar demasiado tiempo, ya que, aunque en ocasiones debe esperar, no pasa de que sean cuatro o cinco pacientes, pero no tener que hacer fila para ser atendido después de decenas de personas.
