Jorge Sánchez, aficionado del Atlas y originario de Querétaro acudió al Hospital General de la entidad para solidarizarse con los familiares de las personas lesionadas al traer agua embotellada, toda vez que estuvo presente en los altercados del estadio Corregidora, donde -dijo- salió ileso por encontrarse en una zona segura, arriba de los palcos.
"Sentí muchos nervios, afortunadamente estaba rodeado de personas pensantes y con valores, y nunca nos insultaron ni dijeron nada. Nos ofrecieron disculpas, que nosotros los queretanos no somos así y lo entiendo, pues yo soy queretano. Es indignante lo que ocurrió, pero no me imagino el trauma con el que salieron los niños", indicó.
Añadió que proviene de El Pueblito y es ingeniero en Logística. Asimismo, el joven de 25 años detalló que se encontraba con su pareja y vio parte de lo ocurrido durante los enfrentamientos, sin embargo, fue de los últimos en salir al quedarse en el área arriba de los palcos a la espera de que todo terminara.
"Nunca dimensioné lo que estaba pasando. Había visto peleas, pero no como esta. Hasta que estuve en casa me di cuenta de lo que había pasado. Se pelearon entre las dos barras, no había mucha seguridad, no había granaderos ni seguridad privada. Donde fueron los golpes yo estaba arriba", relató.
Recordó que fue "una locura; había golpes por todas partes, familias intentando resguardarse, niños quitándose la playera del Atlas, familias" y concluyó en que en ningún momento se imaginó que este evento terminara de esta manera, "pues se respiraba buen ambiente".