Son los niños los que llevan a sus padres a misa para ver a sus personajes favoritos, pues “Elmo”, “El Monstruo Come Galletas” y Enrique, los esperan para hablar de temas importantes, afirma el sacerdote Alfredo Hernández, quien remarcó que el futuro de la Iglesia está en las manos de los niños, de ahí la importancia de crear misas para ellos, para que vivan su religión y tengan gratos recuerdos de su infancia.
La declaración la dio tras oficiar la misa dominical de las 11:00 en el templo de San José de Gracia, ubicado sobre la calle Madero, de la capital queretana, momento en el que resaltó que desconocía que se trataba de muñecos educativos, pues fue en su labor en la Ciudad de México que una familia le regaló los personajes, para que con ellos oficiara misa para los niños.
“Tengo como siete años ya con los personajes, iniciando allá en México, en la iglesia Nuestra Señora de Fátima, ahí fui párroco… De 50 niños que iban, pasaron a 200… Desde que yo llegué (a San José), hace tres años, empecé con el personaje también aquí”.
Al término de la misa, cada niño recibe un dulce, que es regalado para ellos por una famosa empresa de pan y en la ceremonia se les invita a participar, a cambio de algún regalo adicional.
Son los niños quienes llevan a los padres, de ahí que con las ceremonias se desarrollan diferentes encuentros fortuitos, como ocurrió cuando Alex Fernández, actor de profesión, llegó con sus pequeños y se ofreció para hacer, tras bambalinas, la voz de los personajes, pues antes el sacerdote hacía las voces.
Los primeros guiones en Querétaro lo escribió Felipe Estrada, ahora se apoya con la maestra de jardín de niños Teresa Mejía, que son revisados por el padre para, posteriormente, enviarlo a quien les dará vida por un lapso aproximado de cuatro minutos.
“Es muy cuidado el vocabulario, todo, para que al niño le llegue… el guión durante la semana, desde el viernes, el sábado le envió el guión a Alex Fernández para que lo ensaye; de repente Alex se me sale del libreto, para bien del niño y es muy padre, porque tiene niños chiquitos y logra captar para que tenga mayor impacto… procuramos hacer ensayos, a veces previo a la misa”.
Por último, Alfredo Hernández explicó que le sorprende como lo que dicen los personajes quedan grabado en la mente de los niños, quienes incluso le han llegado a repetir frases completas al término de la ceremonia.
“A los papás también les gusta, porque es más digerible lo que tú les das (de mensaje) a los niños, en lenguaje de niños”, finalizó.