Este pueblo diminuto fue la primeralcaldía mayor de la Sierra Gorda en el siglo XVI SAN PEDROESCANELA, Pinal de Amoles, Qro.- En el kilómetro 151 de lacarretera 120 que llega a Jalpan se ubica la desviación a SanPedro Escanela, dentro del municipio de Pinal de Amoles. Sinuoso ymontañoso, el camino se abre paso entre la abundante vegetación yneblina perenne. El clima se debate entre cálido y frío, lo queobliga a los habitantes que caminan sobre la vereda, vestirintermitentemente chamarras impermeables. Al final del camino, seubica San Pedro Escanela, una ranchería cuyos habitantes no suman500 y aún así, posee historia única; en este lugar rodeado demontañas y cascadas, se ubicó hace 400 años la primer alcaldíamayor de la Sierra, cuando en 1599 se descubrieron las minas deplata y plomo, con lo que se convirtió en el sitio de mayorimportancia económica y cultural de la Sierra Goda.
Desde su fundación como alcaldía sus pobladores resguardarondocumentos, objetos, herramientas, piezas arqueológicas ypaleontológicas que narran su historia milenaria. De estacolección repartida en los hogares de San Pedro Escanela, seintegró el acervo del museo comunitario que abrió sus puertas en2010 y que narra en cuatro ejes temáticos, la historia de millonesde años de este lugar.
EL MUSEO
La puesta en marcha del museo comunitario de San Pedro Escanelaempezó en 2003; en 2010 se abrieron las puertas del recinto que loresguarda luego de la participación entusiasta de los pobladoresde la comunidad que colaboraron donando objetos para la colección.“Aportaron sus recuerdos y saberes para darle vida” afirma eltexto que recibe al visitante en la entrada del museo. “Desde unprincipio, el museo de propuso conservar y divulgar la memoriahistórica de la comunidad como un capital cultural que podamosdejar a las nuevas generaciones así como dar a conocer a losvisitantes algo de nuestra cultura, tradición y tierra”continúa el texto sobre una mampara. “Aquí se impulsa laformación de una ciudadanía comprometida con el bien común y sepromueve el encuentro comunitario, se dialoga con el presente y sevislumbra el futuro”. El museo también es una herramienta paraque la comunidad enseñe a los más jóvenes el cuidado del medioambiente, para ello tiene una sección especial ubicada en eltercer piso del edificio donde por medio de la tecnología “sefomenta el aprendizaje y conservación del ambiente natural”.
EL PUEBLO DE SAN PEDROESCANELA
Actualmente con menos de 500 habitantes y –de acuerdo condatos del INEGI- la mayoría de ellos sin estudios universitarios,San Pedro Escanela es una de las poblaciones más antiguas de laSierra Gorda. La comunidad se encuentra a 1570 metros sobre elnivel del mar y está rodeada de una gran biodiversidad; venados yáguilas, con orquídeas, quirámbaros y encinos, son parte de sufauna y flora. La gastronomía local está basada en el maíz,frijol, calabaza y frutas. Destaca el licor de manzana y el pan depulque.
Para conocer la historia de esta pequeña comunidad de bajascasas de dos aguas repartidas en un puñado de calles angostas,está el museo. Su guión museográfico la narra por etapasdivididas en paleontología, arqueología, colonia, minería ycuidado el agua, con lo cual se acumulan millones de años através de objetos que van desde fósiles hasta documentos de sanJunípero Serra.
La historia de San Pedro Escanela inicia en el periodo jurásicohace 170 millones de años, cuando toda la región era un océano.Las capas de roca que conformaban la base de ese océano empezarona emerger de las profundidades creando lo que es hoy la SierraGorda. Restos de animales que habitaban el fondo marino con el pasode los milenios se fosilizaron y algunos hallados y conservados porlos habitantes, ahora se exhiben en el Museo Comunitario.
En el año 300 antes de Cristo arribaron los primeros pobladoresmesoamericanos provenientes de la costa del Golfo y del AltiplanoCentral. El apogeo de poblamiento de la Sierra se dio entre lossiglos VI y X d. C. gracias a las minas de cinabrio. Sin embargo,en el siglo XII la región fue abandonada. Posteriormente, la zonafue ocupada por los seminómadas chichimecas cazadores-recolectoreshasta la llegada de los españoles.
A su llegada, los españoles encontraron dos grupos, los defiliación pame (Xi’Oi), sedentarios herederos de la culturamesoamericana y los jonaces, que se resistieron a la conquista.
En 1547, Conín ya nombrado Fernando de Tapia partió de SanMiguel el Grande (hoy San Miguel de Allende) hacia Xichú y llegóhasta Río Verde. En su marcha fundó iglesias y evangelizó a losnaturales. En Xichú redescubrieron minerales que fueron explotadosde inmediato, lo que convirtió a don Fernando de Tapia en uno delos principales inversionistas mineros de las Escanelas, explotadaentre españoles y naturales.
1599 fue un parteaguas en San Pedro Escanela con eldescubrimiento de las minas de plata y plomo; se construyó unenclave español en la Sierra con la primera Alcaldía Mayor en1609 e hicieron del Real y Minas de las Escanelas el sitio másimportante a la que quedaría subordinada gran parte de la Sierra.El proceso vino acompañado del reparto de estancias para impulsarla producción agropecuaria de la zona y para darle abasto a losmineros. Españoles, negros, mulatos, mestizos e indios nochichimecas se trasladaron al Real de San Pedro Escanela en buscade una mejor manera de vivir.
La iglesia se comenzó a construir de inmediato y la vida delreal se integró como parte de la cultura religiosa española.
El templo es sede de la primera parroquia de toda la SierraGorda y se venera una antigua imagen del Señor de la Salud.
ACTUALMENTE
Para llegar a este poblado se toma el camino desde El Llano,sobre la carretera 120 entre Pinal de Amoles y Jalpan. San PedroEscanela se asoma al bajar las montañas y abrir la neblina. Latorre de su iglesia se yergue frente a una plaza rodeada deedificios bajos que lo mismo albergan casas que comercios; tambiénhay un kiosco, canchas y la oficina delegacional. La calleprincipal sube y termina en un camino de terracería que llega alrío Escanela. El pueblo no tiene más de 500 habitantes y suactividad económica es el comercio, la agricultura y, de unadécada hacia acá, el turismo sustentable. Ahí, a pocoskilómetros, el visitante puede hospedarse en el campamento Peñade la Gloria, desde donde se recorren los imponentes atractivosnaturales: la cascada El Salto, con 35 metros de alto; el Cañónde la Angostura, el Puente de Dios y recorridos en cuatrimoto osenderismo.
La naturaleza domina la vida de los habitantes del lugar: elrío, los árboles, la captación de agua de lluvia y la floranativa son parte sustancial de su supervivencia, por lo que en elmuseo comunitario tienen dedicado un espacio al cuidado del agua.Para el visitante local o foráneo, el recinto ofrece una cita deljefe Seattle, quien dice: “Cuando los hombres lastiman el suelo,se están lastimando a sí mismos. La tierra no pertenece alhombre, es el hombre el que pertenece a la tierra… el sufrimientode la tierra se convertirá en sufrimiento para los hijos de latierra. El hombre no ha tejido la red que es la vida, sólo es unhilo más de la trama. Lo que hace con la trama se lo estáhaciendo a sí mismo”.