Este lunes 15 de junio, cuando la mitad de los estados del país cambiaron a color naranja su semáforo de riesgo sanitario, en algunos puntos de la capital de Querétaro se observó una afluencia considerable de personas en el espacio público, sin embargo, esta no se acercó a la movilidad registrada previo al confinamiento.

Los negocios no esenciales del Centro Histórico, continúan cerrados, al igual que los parques y jardines, sin embargo, continúan las filas en los bancos y la afluencia de vehículos en las calles.

Cabe recordar que Querétaro cambiará su semáforo a naranja hasta el próximo miércoles 17 de junio.

Para Carlos Soto, durante la contingencia "Querétaro no paró" y continúo la afluencia constante de personas en el espacio público. Desde su punto de vista, hay ligeros decrementos en el tránsito de las calles.

"Aquí no han hecho caso a las medidas (...) La disminución es muy limitada, muy poca", dice.

En tanto, Rosa María Nieves señala que la avenida Zaragoza es una de las que mayor afluencia registra, además de que, por su domicilio en San José El Alto continúan realizándose fiestas.

“Hay mucha gente afuera, yo digo que es mucha gente (…) Por ejemplo, aquí en (avenida) Zaragoza, hay demasiada gente”, agrega.

Después de casi tres meses, Berenice Ochoa salió de su domicilio para realizar un pago en el banco, y desde su punto de vista, aunque si hay una cantidad considerable de personas en las calles, esta es menor a lo registrado, previo al confinamiento.

“Veo mucha gente, no sé si estén tomando la verdad las medidas precautorias”, puntualiza.