Eusebio Ventura, responsable del Observatorio Meteorológico de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), indicó que para este 2024 se habrán recuperado el 50% de los cultivos en la entidad tras la temporada de lluvia.
De acuerdo con Ventura, este año ha sido clave para la recuperación de la condición hídrica en el estado. Las precipitaciones de 2024 han alcanzado la media histórica en varias zonas, lo que ha beneficiado especialmente al sector agrícola.
"Este año es de recuperación en cuanto a la precipitación media histórica; las condiciones han sido favorables para que comience a restablecerse el balance hídrico en Querétaro", explicó.
Las lluvias reportadas por la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) en diversas regiones del estado muestran variaciones, pero dentro de rangos históricos que han favorecido a las áreas agrícolas.
Las zonas del semidesierto han registrado alrededor de 350 mm de lluvia, mientras que en áreas más húmedas como Tancoyol y Pinal de Amoles, las precipitaciones han superado los 1,000 mm. Ventura afirmó que estos niveles son indicativos de una condición favorable para el estado en términos de cantidad de agua.
Ventura subrayó que la precipitación en sí misma tiene un impacto directo en el rendimiento, y que en este año se espera una mejora significativa en comparación con 2023, cuando la sequía afectó gravemente la producción.
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Señaló que los beneficios de este incremento en la producción agrícola también se verán reflejados en la economía de los agricultores. El rendimiento de las cosechas será mayor que en 2023, cuando en muchas regiones no hubo producción debido a la sequía, y este año se anticipa un repunte que podría alcanzar o superar el 50% de recuperación.
La temporada de lluvias en 2024 ha traído consigo la esperanza de un mayor rendimiento agrícola y la mejora de las condiciones hídricas en Querétaro, pero será necesario continuar monitoreando tanto las precipitaciones como la situación de los acuíferos en los próximos años para garantizar una recuperación sostenida, concluyó.
