Preocupa a los constructores las acciones del gobierno federal en el sentido de seguir incentivando para que proyectos importantes de obra estén en manos de militares, expuso la Vicepresidenta de Infraestructura Social de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, CMIC, Alejandra Vega Reyes.
Indicó que esta preocupación no solo tiene que ver con la parte de la industria de la construcción que es grave, sino por el problema de inseguridad que se tiene en el país y que urge atenderse.
“Creemos que zapatero a sus zapatos, los militares deberían estar cuidando este aspecto tan delicado ahorita a nivel nacional y están constituyendo, y al mismo tiempo se crea un círculo donde no hay crecimiento económico”, subrayó.
Ante esta situación , informó que la Cámara a nivel nacional se encuentra realizando una serie de mesas de trabajo con las dependencias federales, al menos con las que se ha logrado tener acceso, debido a que todavía hay algunas instancias donde ha faltado un poco de voluntad política en el tema federal, acusó.
Sin embargo, señaló que en lo compete al gremio, se seguirá “tocando puertas” con el gobierno federal, ya que en el caso de las entidades federativas, hay quienes están trabajando con recursos propios como es el caso de Querétaro, punto que ha permitido mantener trabajo, aunque se necesita que el gobierno federal destine recursos para la obra y de esta manera reactivar a la industria.
La ex dirigente en el estado de la CMIC, también informó que dentro de las estrategias del organismo se encuentran reuniones con gobernadores de las diferentes entidades, a fin de tener contacto con estas instancias y sobre todo el compromiso de que la obra que se tiene prevista detonar quede en manos de los constructores “de casa” para de esta manera reactivar la economía de la construcción.
Confío finalmente que el 2020 sea un mejor año y sobre todo que se creen condiciones para detener el decrecimiento que en 2019 registró el sector de la construcción que en el caso local se advierte fue de 13%.