La canasta más grande de México y movible del mundo, se encuentra en el Jardín Guerrero del Centro Histórico de la capital, para recaudar juguetes que serán donados a niños y niñas de Querétaro, en el marco del Día del Niño.
Ángel Hernández Arroyo y Alejandro Paredes Reséndiz, promotores de este proyecto que representa a los artesanos del estado, señalaron que la canasta ha recorrido diversos municipios, siempre con un fin social.
La canasta mide seis metros de largo por cuatro metros de alto, con un peso aproximado de 400 kilos. Está hecha de vara de sauce y elaborada por cuatro artesanos durante un lapso de 15 días.
Las personas interesadas en donar un juguete, que se pide no sea bélicos o de pilas, y despensas, podrán hacerlo hasta las 4 de la tarde, porque a partir de esa hora comenzará a repartirse entre los asistentes.