Comerciantes de Prolongación Corregidora Norte han mostrado su preocupación por la propuesta de instalar una ciclovía en la zona, argumentando que podría afectar el flujo de clientes, especialmente aquellos que llegan en coche para realizar compras rápidas. Sin embargo, parte de la inquietud también radica en que ellos mismos utilizan parte del espacio destinado a la vialidad.
La ciclovía propuesta abarcaría una sección significativa de Prolongación Corregidora Norte, una vía que actualmente sirve como un importante corredor para el tránsito vehicular y el acceso a diversas áreas comerciales.
La preocupación principal de los comerciantes radica en la posibilidad de que la ciclovía reduzca el espacio disponible para estacionamiento en la avenida. Argumentan que muchos de sus clientes llegan en automóvil y que el estacionamiento cercano es crucial para su acceso a los negocios.
No obstante, observaciones recientes indican que parte del espacio actualmente utilizado para estacionamiento no está destinado exclusivamente a los clientes de los comercios.
Una parte significativa del área destinada a la vialidad es utilizada por los propios comerciantes para estacionar sus vehículos. Este uso del espacio ha generado una situación en la que se combina el estacionamiento de vehículos comerciales con las necesidades de los clientes.
Este uso compartido del espacio ha sido un punto de discusión en el contexto de la propuesta de ciclovía. Según QM21, la implementación de la ciclovía ofrecería una oportunidad para reorganizar el espacio vial de manera más eficiente y sostenible.
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Asimismo, ha confirmado que parte del espacio destinado al estacionamiento es utilizado por los comerciantes para sus vehículos.
La organización sostiene que la implementación de la ciclovía podría liberar espacio vial y reorganizar el área de estacionamiento de manera más eficiente, beneficiando así tanto a los ciclistas como a los peatones.
