Ser guadalupanos es buscar la justicia y la paz, por lo que yo quisiera que pudiéramos visualizar una patria mejor después de estas fiestas, afirmó el párroco de la Divina Pastora, Saúl Ragoitia Vega, en la tradicional misa en honor de la Virgen de Guadalupe en las instalaciones de DIARIO DE QUERÉTARO, lugar donde el sacerdote ha oficiado durante diez años.
Ante todo el personal de esta casa editorial, el párroco señaló que así como las empresas, talleres, fábricas y calles detuvieron sus actividades para celebrar a la Guadalupana, contemplaran a la Virgen Morena y dijeran “Tenemos madre y mucha, para rato”, lo que supondrá que dicha celebración mueve a todos para reunirse y profundizar en la fe y en la lucha por la justicia y la paz.
“Yo quisiera que pudiéramos visualizar una patria mejor después de estas fiestas, sino esto sería puro teatro. Si no hubiera un deseo de cambiar sería simplemente una pachanga, cuando esto es un acto de fe, donde podamos comprometernos con la justicia, y ser guadalupanos es buscar la justicia y la paz, es decir ser hombres y mujeres justos, que construyan y promuevan la paz”, refirió Ragoitia Vega.
Señaló que si bien México ha sido noticia mundial por la cantidad de muertes, secuestros y corrupción, llegó el momento de demostrar que “Tenemos madre”, porque dijo, el pueblo ya no se sorprende ante el acontecimiento que ha perdurado durante más de 500 años: la aparición de la Virgen Morena.
En este sentido, el párroco de la Divina Pastora exhortó a los directivos y personal de todas las áreas de DIARIO DE QUERÉTARO a construir la paz y el progreso desde sus trincheras, ya que dijo la empresa que representan contribuye a construir un mejor país.
“Tenemos una gran responsabilidad en esa construcción de la paz y el progreso, sabemos que la información y la labor que ustedes hacen contribuye mucho a una mejor patria, a un mejor Querétaro y yo los animo a que lo hagamos con este espíritu”, destacó Saúl Ragoitia.
Asimismo, invitó a los guadalupanos a conocer y profundizar en su fe, ya que así como celebran a la Morena del Tepeyac, se debe conocer, impulsar y vivir sus creencias, porque hasta el día de hoy no se observa.
“La fe se ha quedado en la letra chiquita, que nunca vemos. Hoy esta celebración nos impulsa a conocer nuestra fe, los invito conozcan su fe, profundicemos, que podamos conocer más de lleno lo que nosotros profesamos, no basta creer, tenemos que vivir nuestra fe”, finalizó.