El Consejo Estatal contra la Adicciones (CECA) continúa con el monitoreo del primer caso de consumo de fentanilo en el municipio de San Juan del Río, aseguró su titular, Andrés Longoria, quien afirmó que no hay focos rojos al respecto, pero sí una debida atención para evitar su incremento.
Y es que, durante el mes de marzo el titular de esta dependencia dio a conocer el registro de seis casos de adicción a esta sustancia, entre el Centro de Atención Primaria en Adicciones (CAPA) y otros establecimientos privados o "anexos", en la entidad, provenientes de San Juan del Río, Querétaro y El Marqués en edades entre los 20 y 29 años.
"Hemos estado monitoreando los CAPA; hasta el momento el único registro que tenemos es el caso de San Juan del Río, y en el caso de los centros residenciales, son tres los establecimientos en donde son cinco las personas que han buscado ayuda", manifestó.
Añadió que el fentanilo es una sustancia con una potencia 50 veces mayor a la heroína, la cual ha tenido sus mayores registros a nivel internacional, principalmente en Estados Unidos, teniendo en Querétaro parte de dichas repercusiones globales.
"Es identificar un fenómeno que supera lo nacional, ya que hemos visto que la fuerza está en la frontera norte, en Estados Unidos, pero tiene olas de impacto hacia nuestro país. Hemos visto la mediatización del tema y lo que nos toca vivir en Querétaro son efectos de ello".
Explicó que más allá de existir un temor en el incremento del consumo de esta sustancia en el estado, existe una posibilidad de que ello pase, motivo por el que buscan generar protocolos de actuación.
"Y ante esta posibilidad lo que hacemos es justamente tener claros los protocolos de actuación, que definitivamente tiene que ser primero en un CAPA donde se haga el diagnóstico, si existe un caso de intoxicación en el momento o habría que proceder en la intervención en un espacio hospitalario".
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Finalmente, refirió que actualmente cuentan con 12 consejos municipales contra las adicciones, próximamente 13, y un comité estatal de supervisión para los centros de rehabilitación; un trabajo colaborativo que permitirá tanto vigilar estos sitios, como generar dinámicas para evitar el incremento de consumo de fentanilo y otras sustancias.