Aumenta la atención a víctimas de violencia de género en la entidad, reportó el Patronato Psicológico Queretano IAP; organización que ha atendido a 3 mil 072 mujeres de enero a agosto de 2022, cifra que representa un 100% más en comparación al año anterior.
"Hay un incremento del 100%. A partir de la pandemia fue cierto que las agresiones subieron. La gente empezó a estar más irritable. No estaba acostumbrada a convivir las 24 horas del día y la manera de sacarlo era con violencia", señaló Stephanie Hernández, directora de esta asociación.
Indicaron que, a decir del Instituto Queretano de las Mujeres, mediante el Banco Nacional de Datos e Información sobre Casos de Violencia contra las Mujeres informó que hasta el mes de agosto 376 Mujeres de los 0 a los 80 años de edad han sufrido algún tipo de violencia en Querétaro.
Añadieron que se requiere de un trabajo interinstitucional para los temas de prevención y atención de los casos, específicamente para trabajar con sectores poblacionales de los 18 municipios, tanto con mujeres como con hombres.
"Existe violencia contra las mujeres, pero en consulta con hombres ellos han sido violentados, desde que los minimizan. Los que hemos atendido son un 20% los que se dan cuenta. Desde niños vienen de familias que padecen violencia y en el no saber cómo manejar toda esta agresión".
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción (ENVIPE), publicada por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), 23 mil 982 mujeres fueron víctimas de violencia de género en Querétaro en el año 2020.
"Una mujer puede tener diferentes tipos de violencia, sea física, emocional, económica. La que más ha habido es la violencia física con 317 casos; violencia psicológica con 306 casos y económica con 128", detalló Elydia Barbosa Benítez, presidenta de Psyue IAP.
Finalmente, indicó que los municipios donde más incurre la violencia es en la capital queretana, el municipio de Corregidora, El Marqués y San Juan del Río, es una escalada de violencia que va de una muestra de celos hasta un feminicidio o violación, lo que alerta a las organizaciones para seguir trabajando en su aminoración.