Para la activista y antropóloga Aleida Quintana, la titularidad de la Defensoría de Derechos Humanos de Querétaro (DDHQ) a cargo de Javier Rascado Pérez, representa una elección lamentable por parte de la LX Legislatura, pues refirió que es un personaje a modo para la actual administración y genera preocupación para quienes acompañan casos de violencia dentro de las instancias públicas de seguridad.

"Anteriormente habíamos evidenciado que las personas a cargo de la Comisión Estatal de Información eran a modo, en un estado que se conoce como uno de los que más ocultan información respecto a violaciones en derechos humanos cometidas en la entidad, así como la presencia de crimen organizado o en temas del ejercicio del presupuesto público", indicó.

Añadió que no le causa sorpresa el que haya sido el candidato elegido para este puesto, de entre 18 propuestas de trabajo. Sin embargo, enfatizó en lo riesgoso que puede ser para el tema de los derechos humanos en la entidad, sobre todo -dijo- cuando las autoridades incurren en faltas hacia estos derechos, "y ¿qué significa? Que la persona que tendría que velar por sus derechos es afín al gobierno".

"Eso me parece su principal riesgo. De por sí estábamos ante una DDHQ que no trabajaba como quisiéramos y esto significa un mayor reto para las organizaciones. Se tienen que revisar los procesos de selección de estas personas, porque si al fin hay "dedazo", ¿de qué sirve una convocatoria?", reprochó.

Sobre lo que se espera para este nuevo ciclo en la DDHQ, señaló que una posible continuidad del anterior periodo, el cual fue dirigido por Roxana de Jesús Ávalos, del que dijo no hubo apoyo ni un proyecto concreto. Aunque sostuvo que, al conocer su anterior desempeño al frente de la Comisión Estatal de Información, "yo creo que sería peor".

"Me parece lamentable el que una persona haya sido electa con su perfil y con el antecedente de la institución donde trabajó. Mi lectura es que puede hacerse más complejo y difícil el proceso para quienes acompañamos casos y tenemos que acudir a la Fiscalía, incluso más que con la antigua titular".

Recordó la dificultad con la que se trabaja al acompañar casos de violencia o de personas desaparecidas, y las constantes faltas a los derechos humanos en la implementación de protocolos u omisiones de los casos, situación que ha denunciado públicamente sin que esto mejore.

Finalmente, cuestionó la decisión por parte de la Legislatura, y advirtió sobre las consecuencias de que se le otorgue mayoría en el Congreso local a integrantes de un mismo partido, como ocurrió en la entidad con el Partido Acción Nacional (PAN), "y la vamos a cargar por varios años, tomando en cuenta que se queda el mismo procurador; se queda el mismo fiscal panista con sus mismas problemáticas".