La mercadotecnia, el secularismo y ciertas costumbres van robando el verdadero espíritu de estos días ofreciendo una Cuaresma light y a la carta, aseveró el obispo de la Diócesis de Querétaro, Faustino Armendáriz Jiménez, al encabezar la imposición de ceniza en la Catedral, momento que marca el inicio formal de la Cuaresma.
En la homilía que ofreció ante un grupo de estudiantes y fieles que se dieron cita en el recinto católico, Armendáriz invitó a los fieles a vivir la Cuaresma de manera diferente, acercándose a la confesión y redescubriendo la blancura de la dignidad de los bautizados, que gracias a celebraciones como el Día del Amor y la Amistad va perdiendo significado.
“La Cuaresma es un tiempo santo de purificación y penitencia, un tiempo para los cristianos que nos ayuda a redescubrir la blancura de la dignidad de los bautizados, pero desafortunadamente la mercadotecnia, el secularismo y ciertas costumbres van minando y robando el verdadero espíritu de estos días ofreciéndonos una cuaresma light, una cuaresma a la carta y alejada de lo que realmente es y lo que realmente la Iglesia pretende con este tiempo especialmente en este día en que tradicionalmente se celebra el día de la amistad”, afirmó el obispo de la Iglesia queretana.
Invitó a los fieles a abrir los ojos de la fe y los oídos del alma para entender con el corazón el misterio de la muerte y resurrección, esto mediante el conocimiento de los signos litúrgicos de estos días, para lo cual, la palabra de Dios ofrece tres herramientas que contribuirán a vivir el verdadero espíritu de la cuaresma: la oración, la limosna y el ayuno.
En este sentido, explicó que la oración es un impulso del corazón, una mirada lanzada al cielo que representa el encuentro entre la sed de Dios y del hombre y que de acuerdo al papa Francisco, el dedicar más tiempo a esta práctica hace que “el corazón descubra las mentiras secretas con las cuales nos engañamos para buscar consuelo en el Señor”.
La limosna dijo, es ayudar y dar al otro, es decir, una actitud de apertura hacia el prójimo que no necesariamente tiene que ser económico, sino brindar tiempo y misericordia a los demás, por lo que “No necesitas dar dinero para dar al otro”.
Mencionó que la tercera herramienta para vivir la Cuaresma es el ayuno, que es la abstinencia o desprendimiento de la actitud consumista que ha venido a ser una de las características de la civilización, por lo que el ayuno es una expresión de solidaridad con Cristo que se deberá realizar los viernes.
“El ayuno en el tiempo de Cuaresma es la expresión de nuestra solidaridad con Cristo, tal ha sido el significado de la cuaresma a través de los siglos que así permanece hoy y el Papa Francisco sobre el ayuno nos dice: el ayuno debilita la violencia, nos desarma y constituye una importante ocasión para crecer y nos permite experimentar lo que sienten aquellos que carecen de lo indispensable y conocen el aguijón del hambre”, agregó Faustino Armendáriz.
Por último, el obispo de la Diócesis de Querétaro mencionó que a partir de ayer se inició con la campaña “40 días por la vida” que es un ejercicio de orar intensa y permanentemente para que muchos bebés se salven en el vientre de su madre y no haya más abortos.
“Decir orar por la vida es orar por todo, pero tenemos que tener objetivos concretos: no más abortos en México, no los quiere nuestro pueblo porque son asesinatos de niños en el vientre de su madre, pero también oremos por la vida de aquellos enfermos y los que cuidan de ellos para que se custodie la vida”, finalizó.
