La sostenibilidad es una palabra que escuchamos con mucha más frecuencia actualmente que antes y es considerado positiva y relevante en una variedad de sectores. En estos días, en muchos de los seminarios web y talleres internacionales, escuchamos de la importancia de educación sostenible. l concepto de las dos palabras juntas, sin embargo, no es completamente claro para algunos profesionales en educación, por lo que es probable que sea aún más confuso para otras personas.
Podemos comenzar por los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU creados en 2015; estos 17 objetivos son nuestras metas más indispensables de esta década, de acuerdo con las Naciones Unidas. Obviamente no son ambiciones que podemos alcanzar muy pronto, pero son metas para mejorar con cada generación. Nuestro primer paso es conocer estos objetivos para ver la importancia de igualdad en educación, alimentación, género, recursos, oportunidades, etc. Son esenciales para tener un futuro más sostenible y saludable para todos.
Nosotros como profesores, podemos agregar un poquito más de sostenibilidad a nuestras clases sin cambiar mucho. No tenemos que ser expertos, solo es necesario tener la ambición para apoyar a los alumnos a construir consciencia. Es tiempo para pensar en el futuro y podemos comenzar por relacionar los temas del curso con los objetivos sostenibles para incluirlos en la conversación.
Educación sostenible se concentra en brindar a la gente el conocimiento y habilidades para tomar decisiones que son más conscientes y justas para el planeta y la humanidad. La idea es que hay habilidades y prácticas ambientales que podemos incluir en nuestros cursos para aumentar la consciencia de todos. Estos valores son relevantes, significativos y sumamente importantes en esta época. Educación sostenible es un objetivo global que ningún país puede ignorar porque es nuestro futuro y todos somos participantes.
*Profesora de la Escuela de Humanidades y Educación, Tec de Monterrey Campus Querétaro.