La venta de ropa interior amarilla, roja y verde para los rituales de fin de año que pretenden atraer abundancia, amor y salud respectivamente, ha incrementado desde este fin de semana, las mujeres prefieren adquirirla para uso personal y los hombres para regalos.
En un ejercicio realizado por DIARIO DE QUERÉTARO se constató que algunos queretanos no creen en los supuestos beneficios de estas prendas, pero sí están dispuestos a comprarlos para regalos porque “parece divertido”; los precios de pantaletas, boxers y bikinis van desde los 20 hasta los 70 pesos.
Bertha Angélica Martínez, encargada de un negocio de lencería en el mercado Escobedo, compartió que en esta temporada el artículo que más se vende es la pantaleta roja y luego la amarilla.
“Esos son básicos, porque el amarillo es para el dinero y el rojo para el amor. Muchos hacen intercambio el 24 y desde antes empieza la venta. Los precios van desde los 20 hasta los 70 pesos, tanto pantaleta, bóxer y bikini se venden”.
Rocío Rodríguez, quien vende estas prendas en el mercado de La Cruz, refirió, “Ahorita ha estado un poquito lento, casi sólo se da desde el 24 hasta el 31, sobre todo los colores rojo y amarillo, pero desde hace un año han estado pidiendo mucho el verde, para la salud”.
Las mujeres son las que más compran estos artículos, principalmente para uso personal y en segunda instancia para regalar, mientras que los hombres los compran generalmente para regalo; el precio va desde los 30 hasta los 70 pesos, dependiendo del modelo.
Gabriela Lozano comentó “Nosotros hacemos lo de salir con las maletas alrededor de la calle para viajar mucho, aventar billetes o monedas y lentejas para la abundancia, usar alguna prenda amarilla para la abundancia y la cena familiar. Siempre lo hacemos toda la familia”.
Rosa María Ramírez acostumbra a hacer limpieza general en su casa, para que se vea todo limpio y “se distribuya bien la energía”, pero no acostumbra a usar ropa interior de colores.
Carla Angélica mencionó que para este fin de año tiene previsto usar ropa interior de color amarillo, pues desde hace años es un ritual que lleva a cabo para que mejoren sus ingresos.
Cecilia Suárez consideró que el uso de prendas de colores en fin de año para mejorar la economía, el amor o la salud “son puro cuento”, pero cuando se trata de regalarlos a otra persona sí le gusta comprarlos porque le parece divertido.
Jaime Rodríguez aseguró que nunca ha usado ropa interior de colores porque no cree que eso funcione, pero sí la compraría para regalarla a alguien más.