La presidenta de la Defensoría de los Derechos Humanos del estado de Querétaro, Roxana Ávalos violó los derechos de la diputada Elsa Méndez al emitir un acta de responsabilidad, argumentó el abogado Julio Aldape, quien agregó que la titular del órgano se ha convertido en policía ideológica y que quiere amordazar la libertad de pensamiento.
Julio Aldape comentó que no existe ningún tipo de prueba que pueda incriminar o determinar que hubo falta a algún derecho humano y que analizan la posibilidad de presentar una queja por discriminación, solicitar la remoción de la presidenta por violación a la ley en materia de derecho humanos y la constitución y también sujeta a juicio político.
“Porque una vez que tiene un cargo en donde protestó cumplir y hacer cumplir la Constitución no lo hace y pretende amordazar en sus opiniones a un diputado que sería también materia de juicio político, pero estamos en el análisis. El juicio político se presenta como una petición ante el Congreso, se determina por una comisión, se va al Pleno y se vota”.
Durante la intervención de la diputada manifestó que su familia y su persona ha sido blanco de un discurso de rencor e intransigencia de quienes quieren imponer una educación que viola la Constitución; creencias de ideologías que no se basan en el progreso científico, por tanto que su deber como legisladora es luchar contra ese de hostilidades y parcialidades.
“Tengo el derecho de manifestar libremente mis ideas y creencias, sin que se me pueda restringir el derecho de expresión por el uso de controles oficiales y particulares o cualquier otro medio, ser reconvenida ni enjuiciada por ello. Por tanto en mi carácter de diputada tengo el firme compromiso de defender el derecho a la vida, a la familia y a la educación”.