Decenas de padres de familia exigen solución a sus denuncias

Eduardo Hernández

  · miércoles 11 de octubre de 2017

LOS PROBLEMAS continúan, señalan los padres de familia; lo principal el resolver el caso de acoso sexual, dice el director.

Durante la tarde de este martes varias decenas de padres defamilia se apostaron en la entrada de la escuela primaria JoséVasconcelos, en el Fraccionamiento Hacienda Santa Rosa, para exigirun diálogo con soluciones al director de la institución, AldoGuillermo Cruz Pérez.

Lo anterior luego de que los padres de familia denunciaransupuesto acoso sexual entre menores, ingreso de armas a la escuela,así como de drogas y presumible maltrato hacia los niños.

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A este respecto, Guillermo Cruz Pérez le dijo a los papás quela supuesta agresión sexual entre menores de la semana pasada enesta institución que dio a conocer este martes DIARIO DEQUERÉTARO, no se hizo del conocimiento de la comunidad para que setomaran las medidas pertinentes, por temor a que los menores fueranjuzgados.

No obstante el docente aseguró que estas problemáticas ya sedieron a conocer a la Unidad de Servicios para la EducaciónBásica del Estado de Querétaro (USEBEQ) desde la semana pasada yque se inició un procedimiento para en la dependencia para tratarde resolver las problemáticas.

A pesar de que este medio solicitó una entrevista con eldirector de la institución, éste se negó por considerar queresultaría contraproducente dar su testimonio a los medios, puestoque esa es la instrucción que recibió desde USEBEQ.

Juan N. denunció ante DIARIO DE QUERÉTARO que su hijo, unestudiante de primer año con problemas de lenguaje, es víctima desupuesto acoso sexual por parte de dos de sus compañeros, quienesla semana pasada le bajaron el pantalón y la ropa interior parafrotarse en sus genitales; se sabe que además hay otros dosmenores que han pasado por una situación de vulnerabilidadsimilar.

“LA INFORMACIÓN ES ERRÓNEA”

La maestra de primer año, Gabriela Pacheco Hernándezconsideró que la información que han manejado los padres defamilia sobre el incidente en el que se vulneró la integridad deuno de sus alumnos es errónea.

“Estamos hablando de menores de edad, es un tema muy delicadoy por instrucción de las autoridades no podemos hablarabiertamente de los niños para evitar señalamientos, sobre todocon el niño que manejan como agresor”.

Gabriela Pacheco consideró que el niño señalado como agresorno tiene la conciencia ni la malicia que le pretenden imprimir lospadres de familia.

“Todo está en manos de las autoridades, USEBEQ y laFiscalía, he registrado en un acta de incidencias lo que ocurrióy lo que los niños expresaron, todos coinciden en la información,(...) sí hubo acciones de un niño, hizo cosas que es muy probableque vio fuera de la escuela, no puedo decir más cosas”.

Referente a estas irregularidades aseguró que ya se tuvo unaplática con los padres y se le dio parte a las autoridadescorrespondientes, por lo que están a la espera de larespuesta.

Con respecto a las acusaciones de los padres de familia de quehay abuso por parte de Gabriela Pacheco hacia los niños, ladocente expresó “lo rechazo total y absolutamente, de ningunamanera”.

NO HAY SOLUCIÓN

A las tres de la tarde dos representantes de la USEBEQ acudierona la escuela primaria e ingresaron a uno de los salones con elgrupo de primer año y el director de la escuela; se sabe por bocade los padres de familia que al interior se desarrollarondinámicas para tratar de dilucidar dónde radica la problemáticaa la que han estado sujetos los menores.

Luego de cuatro horas de esperar una respuesta, losrepresentantes de USEBEQ y el director de la escuela se negaban asalir porque afuera “estaban los medios y no querían darinformación que perjudicara la investigación”, dijo una de lasmadres de familia que iba y venía del salón a la puertaprincipal.

Por último, Aldo Guillermo se acercó a las siete de la tardecon los padres de familia que continuaban en la puerta paracomentarles que la maestra de primer año no dará clases estemiércoles y que el niño señalado como agresor no acudirá aclases hasta que la autoridad competente resuelva qué procede.