Habitantes de Hércules piden proteger La Ladera y varios puntos del cerro que colinda con Milenio III y otros fraccionamientos, porque está en riesgo la riqueza cultural y prehispánica, al igual que la flora y la fauna endémicas de la zona, y provocan fracturas en rocas milenarias como la Peña Agujereada, considerada una maravilla natural.
La regidora de Morena, Ivonne Olascoaga Correa, y un representante de la Dirección de Ecología Municipal, realizaron un recorrido para conocer los daños y las inquietudes de los pobladores, que aseguran que la falta de acción de las autoridades permite la deforestación y las quemas provocadas, lo que causa estrés entre las personas originarias de Hércules.
Los pobladores sostuvieron que las nuevas construcciones descargan su drenaje hacia Hércules, lo que genera un foco de infección, y se suma a las inundaciones y encharcamientos que dejan las lluvias por los escurrimientos, además de que en La Ladera pueden verse grandes rocas o basura que caen hacia la zona.
Recordaron que a principios de los años 90´s, por lo menos 12 hectáreas de La Ladera y el cerro colindante con Milenio III tenían un uso de suelo de preservación ecológica, pero desde entonces se inició una invasión a costa de permisos, cambios de uso de suelo y quemas provocadas.
Advirtieron que esta situación ya provocó la muerte de diversas especies de fauna y flora, como tlacuaches, zorras y zorrillos, palo bobo y cardón, a los que les cerraron el paso a cuevas; y se podrían dañar sitios de la ruta otomí-chichimeca, como la Peña Agujereada o del Juego de Pelota.
Pidieron que se respeten los peñascos, porque son parte esencial para la historia y la identidad de Hércules y La Cañada. Sin embargo, la invasión de los constructores ya modificó algunas costumbres porque se cerró el paso al campo de la Santa Cruz, donde se cumplían varias tradiciones, como la carrera de las cruces.
Denunciaron que justo donde las peñas forman bloques llamados “guardianes”, se construyó un cárcamo de drenaje y pueden verse varios camiones con material de construcción “muy activos” en la zona del Cerro Colorado.
Los vecinos cuestionaron la intervención alrededor de la Fábrica de Hércules, porque el proyecto comercial no tiene relación con la historia del poblado. Externaron su molestia por la tardanza en la obra de recambio de drenaje en la avenida principal de Hércules que inició en octubre del año pasado.
La regidora se comprometió – a través de un comunicado- a solicitar la información que piden los vecinos y a gestionar ante las autoridades correspondientes una posible protección en la zona, a partir de conocer quiénes son los dueños de los predios y el estatus de uso de suelo que tienen.