Alrededor de 120 mujeres que laboraban en el Programa de Transporte Escolar Gratuito del Municipio de Querétaro, fueron despedidas de manera injustificada por parte de la empresa concesionaria del servicio, informaron tres de las afectadas.

Erik Osorio Medina, presidente en Querétaro de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM), quien señaló que decidieron hacer público el caso, porque la empresa de outsourcing no ha acudido a las audiencias conciliatorias.

“No los localizamos, en su domicilio no nos dan razón de ellos, no han acudido a las audiencias conciliatorias, llevamos seis audiencias de 14 casos y no han acudido; y es por ello que lo hacemos público, invitando a la empresa Caiden a que se acerque con nosotros para dialogar”, dijo.

Convocó a la empresa concesionaria a acercarse con la Confederación, para llegar a un acuerdo favorable para las trabajadoras, en cuanto a su liquidación, sus aguinaldos, su recontratación, y en su momento, la firma un contrato colectivo y un reglamento de trabajo.

Comentó que posiblemente el Municipio de Querétaro ni siquiera esté enterado de la situación laboral que llevan a cabo sus empresas concesionarias, y advirtió que en caso de no tener una respuesta por parte de la empresa, iniciarán las demandas ante la autoridad laboral.

Refirió que hasta el momento 14 trabajadoras se han acercado con ellos, por lo que hizo un llamado los demás a denunciar, y no tener miedo de exigir sus derechos laborales.

Una de las afacetadas relató que el 23 de diciembre les mandaron un mensaje al grupo de trabajo, donde les dijeron que les darían unos días de descanso y regresarían el 2 de enero, pero media hora después las citaron por grupos de cinco personas, para despedirlas.

“Lo primero que nos dicen es que nuestros contrato con ellos se terminaba, que ellos perdían la concesión con Municipio de Querétaro y que ellos tenían hasta el 31 de diciembre para dejar toda su papelería en orden, y para esto requerían que nosotros les firmáramos dos hojas”, dijo.

Refirió que en una de las hojas -que algunas trabajadoras se negaron a firmar, la empresa se deslindaba de cualquier situación y decían que no se les debía nada en cuanto a prestaciones, “cuando nada fue real”; y la segunda hoja era una renuncia voluntaria.

Otra de las afectadas señaló que a finales de año anterior fueron despedidas, con la promesa de ser recontratarlas tres meses después, pero hasta el momento no ha sido así.