Al reconocer el incremento de la carga de trabajo del poder judicial y la necesidad de modificar su plantilla laboral, la presidenta del Tribunal Superior de Justicia del estado, Consuelo Rosillo Garfias, rindió el tercer informe de actividades, correspondiente al período 2017-2018.
En el Teatro de la República y en presencia del gobernador del estado, Francisco Domínguez Servién, la magistrada señaló que los desafíos parten de una necesidad común: la suficiencia presupuestal, pues sin la capacidad económica necesaria, el proceso de transformación corre el peligro de quedar incompleto.
“Los retos que acabo de esbozar obligan a renovar nuestro compromiso con la sociedad, con la institución y con la justicia: principio y fin de nuestro quehacer cotidiano", apuntó.