La Federación Mexicana de Organismos Públicos de Derechos Humanos (FMOPDH), en voz de su presidente Braulio Israel Hernández Cruz, desconoció la propuesta legislativa de “eliminar” la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y refirió que, por el contrario, se debe plantear una estrategia para fortalecerla.
El también presidente de la Comisión de Derechos Humanos en el estado de Morelos consideró que un organismo con la CNDH no puede ser eliminado por una reforma constitucional y reiteró que, en la federación, que congrega a los 32 organismos locales de derechos humanos, se desconoce la propuesta planteada el pasado 24 de enero por Rosario Piedra en el sentido de desaparecer al organismo que encabeza y crear la Defensoría Nacional de los Derechos del Pueblo.
“Las comisiones de derechos humanos se convierten en una garantía para hacer efectivo los derechos humanos, de nada servirían los derechos humanos si no tuviéramos una garantía para hacerlos efectivos. En la federación desconocemos esta propuesta legislativa que ha hecho la maestra Rosario Piedra ante la Cámara de Diputados y en ese sentido no podemos respaldarla ni avalarla por la falta de ese conocimiento”, puntualizó.
Hernández Cruz mencionó que todas las leyes que rigen la actuación de las defensorías pueden perfeccionarse, pero no modificarse para suprimir un sistema de defensa de los derechos humanos.
Comentó que el documento no fue presentado a la federación, pese a que la CNDH también forma parte de dicho organismo, y cuestionado sobre el trabajo de Rosario Piedra dijo que será la ciudadanía la que califique su función.
“Creo que en esa filosofía como instituciones hermanas estamos para apoyarnos, para fortalecernos, pero jamás para pretender eliminar un sistema que está, insisto, para la protección para favorecer la eficacia de los derechos humanos en México”, añadió.
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Al respecto, Javier Rascado Pérez, presidente de la Defensoría de los Derechos Humanos de Querétaro (DDHQ), consideró que el cambio de nombre de la dependencia no representa un problema; sin embargo, mencionó que sí lo habría en caso de un cambio de estructura y función.
“El cambio de nombre en sí mismo no implica gran problema, el tema sería cambiar la estructura y la función, recordemos que Querétaro ya es una defensoría, el nombre propiamente no tendría un problema, lo que tendríamos que es estar atentos es ver qué se pretende y no se atente contra la naturaleza misma de los órganos”, dijo.
