La LXI Legislatura de Querétaro enfrenta varios retos legislativos como el caso de la reforma al Código Penal para despenalizar el aborto en la entidad, la aplicación del nuevo código nacional de procedimientos civiles y familiares, o reformar los Códigos penales y civil en materia familiar, consideró la activista Maricruz Ocampo Guerrero.
La activista feminista confió en que la LXI Legislatura de Querétaro se preste al diálogo y esté a la altura de las necesidades del estado, y no se convierta en un pleito constante entre las fuerzas políticas mayoritarias. Añadió que la pasada Legislatura dejó como pendiente la despenalización del aborto acorde a la jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y a las recomendaciones que han realizado diversas instancias al Estado Mexicano.
“Ya definimos que hay un derecho, hay un derecho a decidir sobre nuestro cuerpo, en Querétaro sigue siendo penalizado porque no se ha reformado la ley, y además no se ha considerado cómo se va a atender esta cuestión, porque el aborto es una cuestión de salud pública, no es una cuestión de moralidad, es un tema de salud pública y una cuestión de derechos humanos”, dijo.
Refirió que existe una obligación de que en 2027 se aplique en todo el país el nuevo Código nacional de procedimientos civiles y familiares, por lo que urgió a que se legisle al respecto para transitar a dicha normativa, además de reformar los Códigos Penal y Civil para agilizar los trámites de custodia de menores, pues señaló que hay custodias que tienen más de dos años en proceso.
Apuntó que también se debe trabajar en una reforma a la ley de derechos humanos del estado para que en la renovación de la presidencia de la Defensoría de los Derechos Humanos de la entidad (DDHQ) en 2027 sea a través de un examen de conocimientos y bajo un escrutinio más crítico y preciso.
“Tienen que revisar al interior todos los organismos, direcciones de la Legislatura, porque hasta la fecha han estado ocupados por hombres, investigación, servicios parlamentarios, etcétera, tienen que ser paritarios, la Legislatura tiene que comprender que la paridad es en todo, en todo, no pueden seguir utilizando esas direcciones para premiar a sus cuates que los acompañaron en las campañas”, añadió.
Además, destacó que la LXI Legislatura debe distinguirse por contar con mujeres tanto en los órganos como en las dependencias legislativas debido a que, históricamente, éstas son ocupadas por hombres, por lo que subrayó que las mujeres deben ocupar espacios de toma de decisiones, lo que no ocurrió en la pasada Legislatura.
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“Necesitamos los lugares porque cuando no estás en la mesa, estás en el menú, esa es la primera. La segunda es entender que nosotras, las mujeres que llegamos a ocupar esos espacios como son las curules, tenemos una enorme responsabilidad con las mujeres que no tienen las mismas oportunidades que nosotras, que no tienen las escuchas, los micrófonos, a las que no les abren las puertas, es nuestra obligación”, aseveró.
